Un incendio que se inició este sábado alrededor de las 11 p. m. en un tranquilo barrio de Santa Cruz de Guanacaste, acabó con las vidas de una abuela, su nieta y dos amiguitos de la niña.
Según detalló el Cuerpo de Bomberos, el siniestro habría iniciado por una candela que que se encontraba encendida.
Al parecer la vela servía para ofrecer oraciones por un familiar que murió recientemente.
Las víctimas fallecidas fueron identificadas por las autoridades como María de los Ángeles López López, de 62 años y abuela de María Fernanda Rodríguez, de ocho años.
Por su parte, los otros dos menores que murieron fueron dos hermanos, vecinos de María Fernanda: Michelle y Juan Manuel Barrantes, de ocho y seis años, respectivamente.
Michelle fue encontrada por los bomberos todavía con signos vitales. Ella estaba en el baño de la vivienda pero presentaba quemaduras en el 90% de su cuerpo y murió cuando era llevada al centro médico.
Su hermano, al igual que la mujer adulta y su nieta, ya habían muerto cuando fueron localizados por los socorristas en uno de los cuartos.
Las autoridades tuvieron que usar tres máquinas de bomberos de Filadelfia, Nicoya y Santa Cruz; y batallaron por dos horas para apagar las llamas.
Nadie daba razones de si había personas atrapadas. Se supo hasta que los bomberos levantaron los escombros y dieron con los cuerpos.
Sobreviviente. La única persona que sobrevivió al incidente fue el teniente de la Fuerza Pública, Fernando Rodríguez Villarreal, quien estaba casado con la adulta fallecida.
Según relató, él estaba durmiendo en la parte frontal de la vivienda, y su esposa y los niños en una recámara que está ubicado en la parte trasera.
Rodríguez detalló que cuando vio las llamas, salió corriendo a abrir los portones, pero el susto y los nervios lo traicionaron y no pudo auxiliar a su familia.
Narró que la pareja de hermanitos que murió eran vecinos y amigos de su nieta. Supuestamente, los padres de los menores les permitieron quedarse durmiendo esa noche en la vivienda.
Héctor Chaves, director del Cuerpo de Bomberos, indicó que los niños y los adultos mayores son la población más vulnerable a incendios.
El año pasado, el total de víctimas mortales en incendios fue de 12 personas, mientras que en tres días de este año ya se llegó a la tercera parte de esa cifra.