El buzo costarricense Carlos Manuel Bonilla Rivas, de 51 años, fue detenido con una carga de heroína la mañana del lunes en la capital panameña.
La información fue confirmada ayer por voceros de la Policía Nacional de Panamá (PN), quienes agregaron que Bonilla enfrenta una causa por tráfico internacional de estupefacientes, no tiene derecho a fianza y puede ser condenado a 10 años de prisión.
Bonilla, oriundo de Limón, era investigado desde hace varias semanas por agentes antidrogas de la Policía Judicial aquí, quienes alertaron a la Policía panameña acerca del viaje que realizaría a ese país.
Las autoridades vigilaron al costarricense desde su llegada a Paso Canoas en un bus comercial, y lo siguieron hasta la capital panameña, donde esperaron hasta sorprenderlo en un céntrico hotel capitalino con la carga de droga.
Estaba en compañía de un colombiano identificado como Diego Rubén Paz Paredes, de 41 años.
Al parecer, Bonilla tenía en su poder 606 cápsulas de heroína que entregaría a traficantes conocidos en medios policiales como “mulas”, para su trasiego a EE. UU. Bonilla figura como secretario de una empresa chatarrera inscrita hace pocos meses en Costa Rica.