La recuperación de las zonas afectadas por el huracán Otto cuesta ¢130.000 millones, según se detalla en el plan general de emergencia aprobado este miércoles por la Junta Directiva de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
Esa entidad ya definió las obras prioritarias, que se cubrirán con ¢15.400 millones que provienen de un fondo de contingencia que el Banco Mundial girará al Ministerio de Hacienda.
Por ejemplo, se dará énfasis a labores para eliminar vectores que puedan provocar enfermedades. Se removerá toda la basura, chatarra, piedras y palos que sigue acumulada en algunos cauces de ríos, terrenos baldíos, fincas y a la orilla de algunas calles, se construirán diques y se dará apoyo a los frijoleros de la zona norte.
El huracán Otto, que azotó a nuestro país el jueves 24 de noviembre del 2016, dejó diez muertos y daños por ¢106.000 millones, pero la recuperación tiene un costo mayor, porque contempla obras de refuerzo para no reproducir vulnerabilidades y evitar nuevas tragedias.
Desglose. La CNE informó de que para recuperar carreteras, puentes y alcantarillas se requieren ¢84.000 millones.
Para soluciones de vivienda se necesitan ¢3.400 millones, para el sector agrícola ¢6.000 millones, en acueductos ¢4.545 millones y en ambiente otros ¢1.600 millones.
Otros ¢17.455 millones son necesarios para recuperar centros educativos, edificios públicos y atender los requerimientos en salud y el sector pecuario, entre otros.
El plan general contempla 945 intervenciones, de las que 103 tienen que ver con la red vial y que deben ser atendidas con prontitud, dice un comunicado de la CNE.
El plan implica realizar trabajos en Upala, Guatuso, Bagaces, La Cruz, Los Chiles, San Carlos, Grecia, San Ramón, Sarapiquí, Osa, Golfito, Corredores y Pococí.
Todas estas intervenciones se financiarán con dineros de la CNE, el crédito del Banco Mundial, aportes de las entidades públicas y donaciones.
En detalle, el Fondo Nacional de Emergencias aportará ¢96.500 millones (aquí se incluye el crédito y las donaciones), mientras que varias instituciones públicas girarán los ¢33.500 millones que faltan.
Los datos finales revelan que el ciclón dejó 10.831 personas afectadas directamente en 461 comunidades de las siete provincias, lo que obligó a abrir 42 albergues para 7.425 personas. Para la atención de primer impacto la CNE gastó más de ¢5.670 millones.
El cantón con más daños fue Upala, con pérdidas por un monto superior a los ¢38.422 millones, seguido por Bagaces con ¢19.738 millones y Los Chiles con ¢18.983 millones.
El dinero de las donaciones. En cuanto al dinero proveniente de las donaciones, la CNE informó de que faltan por ingresar las que administra el Banco de Costa Rica, entidad que tiene 10 días hábiles a partir de este miércoles para entregar los recursos a la CNE, según una directriz de la Contraloría General de la República.
Además, una donación de ¢5.600 millones provenientes de Emiratos Árabes Unidos, que aún no ha ingresado a las arcas del Estado, servirá para la atención de los acueductos.
Aparte de eso, la solidaridad de los ticos permitió recolectar ¢1.964 millones de los cuales ¢1.200 millones ingresaron a a la CNE de las cuentas de la Cruz Roja, ¢604 millones de la Teletón y ¢160 los donó la Iglesia católica por medio de Cáritas.
La Contraloría ejercerá una labor fiscalizadora para garantizar la transparencia en la inversión de los recursos que se utilizarán en forma solidaria durante este proceso. Además, habrá dos auditorías adicionales, una interna de la CNE y otra externa, de la firma Deloitte, que firmó un convenio con Casa Presidencial.
El decreto de emergencia 40.027 publicado el 28 de noviembre del 2016, permitió atender a los damnificados por el huracán Otto con más agilidad.