El Tribunal Penal Juvenil de Heredia impuso ayer 15 años de cárcel a un estudiante por el asesinato de Nancy Chaverri Jiménez, directora del Colegio Montebello, en Mercedes Sur, Heredia.
La lectura del veredicto estuvo a cargo de la jueza María José Elizondo Alvarado y se prolongó por alrededor de 25 minutos. Como el juicio fue declarado privado desde su inicio, la prensa no tuvo acceso a la sala de debate.
Federico Morales, abogado de la familia Chaverri, explicó que la jueza consideró que el menor tenía pleno uso de sus facultades cuando asesinó –de un disparo– a Chaverri el 1.° de julio en la oficina de ella en el centro educativo.
Por esa razón, manifestó el profesional, el menor fue sentenciado a la pena máxima (15 años) permitida por la Ley de Justicia Penal Juvenil.
Ayer no fue posible consultar al defensor del menor, Guillermo Ampié, sobre el pronunciamiento. Durante el debate, el abogado intentó demostrar que al menor no debió imponérsele una medida privativa de libertad debido a la afectación psicológica que sufrió el adolescente por las presuntas agresiones físicas y verbales que le infligió Chaverri.
No obstante, esa aseveración fue rebatida en las conclusiones por la fiscala Éricka Chaves, quien sostuvo que no había ninguna justificación para que el alumno cometiera el homicidio.
A la lectura de la sentencia se presentaron los defensores, la fiscala, el imputado y sus padres.
Argumentó que la jueza evidenció mucha inexperiencia en el proceso.
Adelantó que elevarán el caso al Tribunal de Casación Penal, en Goicoechea, San José.
Por el contrario, el abogado Federico Morales consideró que la jueza hizo un manejo adecuado del proceso. Ayer, en una entrevista con la prensa, Javier Lúcar, viudo de Nancy Chaverri, felicitó a la Fiscalía por su labor durante el juicio, aunque recalcó que ninguna pena judicial le devolverá a su esposa, la madre de sus hijos.
Lúcar expresó: “Hoy no es un día de venganza, sino un día de justicia. Estoy cerrando una etapa muy dura; ha sido un proceso judicial en el que sufrimos mucho”.
El viudo de la educadora manifestó que luchará por superar los duros momentos que han tenido que vivir él y sus dos hijos, Luis Diego y Giancarlo .
“Nancy hubiera querido que saliéramos adelante y con la frente en alto. Todo esto hemos sufrido y enfrentado esta situación: yo no digo que cada día será más fácil, sino menos difícil.
”Mis hijos y yo seguiremos unidos, como siempre. Las relaciones con ellos ahora es como un trípode. Somos varones y, a veces, cada quien quiere irse por su lado, pero nos hemos unido demasiado.
”Cuando jugamos y recordamos de Nancy, lo hacemos con alegría. A veces, pensamos en qué haría si ella estuviera aquí y bromeamos de lo que haría”, declaró.
El padre del menor sentenciado expresó ayer a