Los coligalleros ahora utilizan piezas de los diferenciales de los camiones para poder moler el sedimento minero y así obtener oro en Crucitas de Cutris, en San Carlos, zona norte del país.
El descubrimiento de ese ingenioso sistema lo hizo el Ministerio de Seguridad Pública durante una nueva incursión que hacen en Crucitas desde el 23 de agosto. Dicha acción policial es conocida como Lapa III y cuenta con la participación de Fuerza Pública, Policía de Fronteras, Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS) y la Policía de Migración.
“Consiste en tomar la carcasa del diferencial. Ellos buscan, en paralelo, una piedra grande, a la cual le hacen un hueco y le meten una varilla en forma de 'P' o 'Y'. Luego, depositan el material dentro de la carcasa, le ponen la piedra encima y, entre dos personas, mueven la piedra para moler lo que está dentro.
“Después, lo sacan y lo procesan con mercurio y obtienen oro”, explicó el viceministro de Seguridad Pública, Luis Carlos Castillo, quien agregó que son instrumentos “netamente artesanales, diseñados e inventados por ellos mismos”.
Con este nuevo sistema, los oreros dejaron de lado la modalidad de extracción tipo “hormiga”, pues era muy artesanal, a usar este tipo de equipo pesado para realizar extracción a gran escala, apuntó el viceministro.
En ese operativo, la Policía encontró cuatro equipos de estos. “Es usado porque es manual y es más barato”, agregó Castillo.
Incautaron también cerca de media tonelada de sedimento minero, además de oro ya procesado.
Además, decomisaron 10 palas, siete cayucos (botes), 19 linternas de cabeza, dos linternas de mano, cinco bombas de agua, dos rastras artesanales y cuatro pilones artesanales, entre otros artículos.
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Acciones paralelas
De forma simultánea, en la operación Lapa III, las autoridades aprehendieron y remitieron a las autoridades migratorias a 135 nicaragüenses en condición irregular. Muchos de ellos estaban en cuarterías improvisadas.
También frenaron actividades de tala ilegal de bosques primarios y secundarios, con la cual se pretendía conseguir madera para fabricar instalaciones, como cuarterías.
Dicho material se entregó a las autoridades del Minae para que se le de un “uso más apropiado”, indicó Allan Obando, director de la Policía de Fronteras.