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Dos hombres fueron ultimados entre la noche del sábado y la madrugada de este domingo en Chacarita y en Barranca, dos de los distritos más conflictivos del cantón central de Puntarenas.
Este domingo, a las 4:39 a. m. en la vía pública de la ciudadela Manuel Mora, en Barranca, ocurrió uno de esos tiroteos que cobró la vida de un sujeto identificado como Jacson Enrique Aguilera Bravo, nicaragüense de 41 años, quien recibió al menos tres balazos que percutieron desconocidos desde una moto que llegó al sitio.
Aguilera avanzó herido unos metros y luego quedó tendido en la calle, donde los cruzrojistas lo declararon sin vida. Era vecino de la zona y, según la Fuerza Pública, ya lo habían investigado por varios delitos en ese distrito, que es uno de los tres con más homicidios en Puntarenas. La Policía realizó un recorrido por las inmediaciones de la zona; sin embargo, no dieron con los sospechosos.
“Yo salía de mi trabajo a las 4 de la mañana, cuando pase por ese lugar prácticamente a pocos metros de la balacera, vi cuando le dispararon al sujeto, quien luego de correr unos metros cayó en media calle. Fue un susto enorme ya que uno nunca espera transitar y ver algo así”, comentó un lugareño de apellido Garita.
Los agentes recogieron evidencias balísticas en el sitio y realizaron el levantamiento del cuerpo a las 6 a. m., para llevarlo a la Morgue judicial.
Otro acribillado
Horas antes de ese asesinato, la Cruz Roja atendió otro similar a las 10:25 p. m. del sábado en Veinte de Noviembre, Chacarita, a escasos seis kilómetros de donde mataron a Aguilera. Cuando la ambulancia llegó al sitio, 150 metros a oeste del parque recreativo de esta comunidad, encontró sin vida a Michael Eduardo Morúa Picado, de 22 años, quien presentaba unos 20 impactos de bala en rostro, cabeza, pecho y abdomen. Al joven o abordaron dos sujetos que al parecer viajaban en moto y le dispararon a quemarropa al verlo en vía pública.
El cuerpo quedó en una calle donde habían viviendas en ambos lados. Varias personas que estaban en los corredores de sus casas escucharon las detonaciones que acabaron con la vida de Morúa.
El veinteañero era vecino de Esparza, oriundo de San José y padre de dos menores de edad. La Fuerza Pública lo había investigado por diversos delitos como portación de armas ilegales y delitos contra la vida.
“Yo estaba cerca de donde ocurrió la balacera. Se escucharon muchas detonaciones de bala, es increíble como esto ya se ha salido de control, en algunas casas habían personas en los corredores y todos corrían hacia adentro. Es lamentable ver como los jóvenes se matan entre ellos por cobrar venganzas” comentó un vecino cuya identidad no brindó por seguridad.
El cuerpo de Morua fue levantado por agentes del Organismo de Investigación Judicial de Puntarenas pasadas la 1 a. m. de este domingo. En el lugar los agentes encontraron 43 casquillos de pistola calibre 9 milímetros.
La Policía Judicial investiga si existe o no relación entre los dos homicidios que se investigan como aparente ajustes de cuentas, ya que en ningún caso se robaron pertenencias de las víctimas y ambos recibieron balazos múltiples.
El OIJ registra en lo que va de este año 386 asesinatos en todo el país, de ellos 63 han ocurrido en la provincia de Puntarenas. Los distritos de Chacarita y Barranca son de los que tienen más casos, con siete y seis, respectivamente.
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Entre los casos más recientes, la mañana del pasado 7 de agosto mataron en vía publica de Fray Casiano, Chacarita, a Stephanie de los Angeles Salazar Calero, de 24 años, quien fue impactada en la cabeza por dos motociclistas frente a una panadería.
