Tres hombres y dos mujeres, con edades entre los 19 y 38 años, fueron detenidos este viernes como sospechosos de la desaparición del empresario italiano Stefano Calandrelli.
El extranjero, de 51 años, fue visto por última vez el lunes 14 de mayo en el centro comercial Escazú Village, donde trabajaba como administrador.
Los sospechosos tenían en su poder bolsas plásticas que contenían trozos de tela ensangrentados que las autoridades están analizando en estos momentos, así como otras pruebas que los vincularían con la desaparición.
Entre tanto, el Organismo de Investigación Judicial realiza búsquedas en el Zurquí, tras recibir información confidencial de que el italiano podría encontrarse en dicha zona.
El OIJ reveló que cuatro de los detenidos no tienen antecedentes penales, y aún se encuentran estudiando los antecedentes de la quinta persona. Se desconoce, además, qué tipo de vínculos existen entre los sospechosos.
Los tres hombres responden a los apellidos Cerdas Sánchez (38 años), Rivas Suazo (22), Makenzy Banton (20). Mientras que las mujeres fueron identificadas como Vega Badilla (19 años), y Smith Smith (24).
Los operativos para detenerlos se realizaron este viernes en Limón, Heredia y Alajuela.
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Mujer, clave en la desaparición
Según información recopilada por la Sección Delitos Varios del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), una de las mujeres capturadas figura entre las últimas personas con quienes tuvo contacto el italiano antes de su desaparición.
La Policía Judicial no precisó a cuál de ellas se refería.
No obstante, trascendió que la mujer vive en San Joaquín de Flores, por lo que se mantuvo vigilada su vivienda. Esto permitió identificar a un hombre quien salió con unas bolsas plásticas de dicha casa, con rumbo a Río Segundo de Alajuela, donde las desechó en plena vía pública.
El hombre fue detenido cuando llegaba a su vivienda, en San Rafael de Alajuela, pero allí no se encontraron pruebas de interés. No obstante, según el OIJ, las bolsas contenían trozos de prendas con aparentes rastros de sangre y otros indicios que no fueron revelados.
Por el momento, los desechos están siendo analizados en el Complejo de Ciencias Forenses.
La propietaria de la casa de San Joaquín de Flores, quien se presume estuvo con Calandrelli antes de su desaparición, fue detenida en Limón, en la vivienda de un familiar suyo.
Los otros dos hombres y la otra mujer fueron aprehendidos en la misma propiedad en Heredia. En un allanamiento en ese sitio, las autoridades encontraron indicios que se relacionan con la desaparición del empresario, reconocido por haber sido el propietario de populares restaurantes en el país y por ser el exesposo de la periodista Adriana Durán.