EscucharJesús Alberto Arce Céspedes, único sospechoso del asesinato de la joven Kassandra María Sánchez Ballestero, recorrió 164 kilómetros para esconderse de la Policía, luego de dispararle a la muchacha en las afueras del bar El Rey, en San Rafael de Poás, Alajuela.
De acuerdo con la línea de investigación, respaldada también con un video que servirá como prueba, el pasado 6 de marzo por la noche, Sánchez intervino en una discusión entre un conocido de ella y Arce. En determinado momento, el último accionó un arma de fuego e impactó a la víctima, quien falleció en el lugar. Casi de inmediato, el presunto homicida escapó del sitio y desde una fecha aún no precisada se refugió en una solitaria vivienda en el Ceibo de Cariari de Pococí, Limón.
Entre el bar y el inmueble en el que este sujeto, conocido como Chucky, fue detenido este martes por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y la Fuerza Pública, hay 164 kilómetros, aunque si se pasa por San José la distancia se reduce a 140 kilómetros. Sin importar la ruta que haya seguido aquella noche, lo cierto es que el recorrido que realizó para intentar evadir a las autoridades judiciales es considerable.
Durante los días que Arce estuvo en condición de prófugo, los agentes judiciales recibieron diversos datos y fue uno de ellos el que los llevó a realizar labores de inteligencia y seguimientos en el Ceibo. En esa comunidad, Arce fue aprehendido, después de que la Policía rodeara la casa en la que estaba.
“Dentro de una casa de madera, a un kilómetro de la escuela de la localidad (del Ceibo), se localizaba el hombre requerido por el OIJ (...). La propiedad cuenta con un taller de ebanistería, tiene una fachada sin portones y con plena visibilidad (...), por lo que se corroboró la presencia de dos masculinos, se rodeó la vivienda y las personas que se encontraban en el inmueble salieron y se pusieron a la orden de los oficiales judiciales, de inmediato se hizo la detención”, explicó la Policía Judicial en un boletín de prensa.
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Los tatuajes de este hombre de 30 años, uno de ellos en el cuello que dice “Chus”, fueron claves para confirmar que se trataba de la persona a la que los oficiales buscaron por 16 días, por lo que posterior a la captura lo remitieron primero a las celdas judiciales del Tribunal Penal de Pococí y, posteriormente, a las de Alajuela.
Días atrás trascendió que Arce se encontraba en el régimen semiabierto del Ministerio de Justicia, es decir, que para cumplir su sentencia solamente debía dormir algunos días en el Centro de Atención Semiinstitucional San Luis, en Santo Domingo, Heredia. Sin embargo, el Poder Judicial confirmó que a su nombre existía un incidente por quebranto de pena, el cual consta en un expediente presentado al Juzgado de Ejecución de la Pena de San José por el Centro San Luis.
Este expediente fue declarado con lugar el 16 de abril del 2021, momento en el que se ordenó “la captura del sentenciado”. Empero, por motivos que se desconocen, esta no se había ejecutado.
Chucky tiene antecedentes por robo de vehículos y estuvo preso en el Centro de Atención Institucional (CAI) Jorge Arturo Montero, conocido como La Reforma, en San Rafael, Alajuela.
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Prisión preventiva
Este miércoles, una vez que fue indagado, Chucky quedó a las órdenes del Juzgado Penal para la audiencia de solicitud de medidas cautelares, en la cual se le impusieron seis meses de prisión preventiva.
El fiscal adjunto de Alajuela, Alejandro Araya Vargas, dijo el imputado es investigado dentro del expediente 22–001216–0305–PE y explicó que en este caso hay riesgos procesales comprobados y prueba contundente, factores que respaldaron su solicitud de prisión, también apoyada por Grigory Antonio Chaves Chaverri, abogado de la familia de la joven.
Paralelamente, Sonia Mayela Ballestero Corella, madre de Kassandra Sánchez, presentó una querella que le permite ser parte de todo el proceso penal por el delito de homicidio simple que se seguirá contra Arce.
Chaves manifestó que aunque la semana pasada se interpuso la denuncia, es con la querella que Ballestero puede estar presente en todas las audiencias que se realicen sobre el caso, desde la de petición de medidas cautelares, hasta el juicio.
“Al presentar la querella, de una vez se le informaron los derechos a doña Sonia, que no son derechos que nacieron el día de hoy, sino que están en el Código Procesal Penal. Lo importante es que ella como víctima puede participar en las audiencias y formalmente solicitar ser oída y establecer requerimientos ante el juez penal”, explicó.
El abogado detalló que doña Sonia Ballestero está ahora dentro del Programa de Atención y Programa de Protección, ya que luego de la captura del sospechoso un carro pasó por su casa tomando un video, por ello será respaldada en todo momento.
Asimismo, recordó que el próximo domingo a las 10 a. m. se realizará una marcha pacífica en el parque de Poás, donde se rendirá un homenaje a Kassandra y se dará respaldo a su familia.
Joven tranquila y recién graduada
Kassandra Sánchez era vecina de Carrillos de Poás, donde vivía con su madre, quien afirmó que era una muchacha buena, tranquila y que acababa de graduarse de Inglés básico, así como también de un curso para ser asistente de cajera. En febrero pasado, la joven cumplió 19 años, quería estudiar nutrición y era hija única.
Un día después del crimen, doña Sonia escribió en su cuenta de Facebook: “Te apagaron la luz mi vida. Me rompieron mi corazón. El dolor es algo que no tiene explicación. Vuela alto mi nena hermosa, mamá te amará siempre y para siempre. Hoy el cielo está de fiesta con este ángel, tan coqueta y llena de luz, serás lo más hermoso que Dios me dio. Te amaré hasta la eternidad”.
Información actualizada a las 8:55 p. m. con el dato de la prisión preventiva.
