El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) desmintió que la doctora María Luisa Cedeño Quesada conociera o tuviera una amistad con un bailarín de apellidos Herrera Martínez, sospechoso de matarla el pasado lunes 20 julio en un hotel de Manuel Antonio de Quepos, Puntarenas.

La institución reveló el dato este jueves ante consulta de La Nación, luego de que se rumorara que la comunicación entre ambos era constante.

Además, informaron que el móvil del crimen permanece en investigación y declinaron de referirse a los hallazgos del allanamiento realizado durante la noche del martes y el todo el miércoles en La Mansion Inn, donde Cedeño se hospedaba desde el 18 de julio.

Esos días se hicieron análisis químicos para detectar fluidos, pero se desconocen los alcances de las pruebas.

“No se conocían, no tenían amistad. El móvil está en investigación y, sobre artículos de valor u objetos ubicados, no nos referiremos”, afirmó la Policía Judicial por medio de su oficina de prensa.

Cedeño, de 43 años, fue hallada sin vida en la habitación 21 del alojamiento temporal. Estaba en la cama, envuelta en una cobija, ensangrentada y presentaba varios golpes.

Precisamente, la revisión preliminar del cuerpo reveló que tenía múltiples hematomas y no heridas de arma blanca, como se informó en un inicio, pero será hasta que esté el resultado de la autopsia que se determine la causa exacta de su muerte.

Indicios claves

Horas después de que trascendió el crimen, Herrera, un nicaragüense de 32 años que vivía desde hace un año en el cuarto 3 del hotel y ayudaba en algunas tareas al dueño del lugar, fue detenido.

Los primeros indicios lo incriminaron , ya que él tenía varios rasguños y ella las uñas de sus manos quebradas.

Además, en el lugar se encontraron huellas de zapatos que también fueron tomadas en cuenta para la aprehensión.

Desde las 9 a. m. de este jueves arrancó la audiencia de solicitud de medidas cautelares para determinar si el hombre irá a prisión por al menos seis meses, mientras avanza la investigación del caso. No obstante, a las 6 p. m. se desconocía el resultado de la misma.