El presunto homicida de Karolay Del Carmen Serrano Cordero, de 26 años, habría ordenado asesinarla en agosto del año pasado para ocultar la relación sentimental que tenía con ella.
Al menos, ese es el móvil que hasta este jueves manejaba el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), que desplegó cinco allanamientos en Rincón de Ricardo, en San Pablo de Heredia, y en Lotes Peralta y Bajo Los Molinos, en San Rafael de esa misma provincia, para detener a tres adultos y dos adolescentes vinculados con el crimen.
Wálter Espinoza Espinoza, director de la Policía Judicial, explicó que Serrano tenía una relación sentimental con el principal sospechoso de matarla, un hombre de apellidos Cubillo Hidalgo, de 21 años, quien fue capturado esta mañana en Rincón de Ricardo.
Afirmó que, a su vez, Cubillo tenía una relación formal con otra mujer y, para evitar que esta última se enterara de su vínculo con Karolay, ideó el plan para asesinarla.
“Estas dos personas (la víctima y Cubillo) fueron compañeros de trabajo, tuvieron una relación sentimental, pero Cubillo tiene otra pareja y obligaciones de carácter familiar. Aparentemente, surgió la posibilidad de que la pareja se enterara de relación con Serrano y eso provocó que él entrara en estado de crisis”, aseguró el jefe policial.
Por ello, en agosto del 2019 habría contactado a una adolescente de 16 años, quien le enlazó con los dos presuntos sicarios, dos jóvenes que en aquel entonces tenían 17 años. Hoy uno de ellos ya cumplió la mayoría de edad.
Además, se aprehendió a otro hombre de apellidos Soto Rodríguez, de 19 años. Según un comunicado del Ministerio Público, este fungió como el enlace entre la adolescente y los dos supuestos asesinos.
El 12 de agosto del año pasado, día en el que habría ocurrido el asesinato, “a las 10:45 p. m., Cubillo habría llegado a las afueras de la casa de Karolay y, aparentemente, la llevó a un sector cercano al volcán Barva. Cuando se encontraban en el sitio, se presume que los sospechosos la habrían asesinado”, explicó la Fiscalía en el mismo boletín de prensa.
Su cuerpo fue dejado una zona montañosa en las cercanías de Sacramento, poblado aledaño al volcán Barva.
Un rastro perdido
Karolay Serrano Cordero, mamá de una bebé de 3 años, vivía en Guararí de San Francisco, Heredia.
Aquel 12 de agosto, la muchacha salió de su trabajo en la empresa Bimbo, tomó un bus y se bajó en el Palí de Los Lagos. Luego caminó unos 400 metros para llegar a la casa que alquilaba.
Más tarde, en la noche, abordó el vehículo blanco y nunca más se supo de ella.
En las últimas semanas, el OIJ divulgó un video en el que se ve a la joven subir al vehículo. A la postre, ese carro fue localizado este jueves en la casa de Cubillo, en Rincón de Ricardo.
El mismo será inspeccionado por peritos de la Policía Judicial para tratar de detectar sangre u otros rastros importantes para la pesquisa.
Paralelamente, en febrero las autoridades recibieron información confidencial que daba cuenta de que el cadáver de la muchacha estaría en una zona montañosa aledaña al volcán Barva.
Tanto los oficiales del OIJ, como familiares de la víctima, peinaron el sitio en busca de restos óseos.
Este miércoles la Policía Judicial descartó que los huesos ubicados el 6 y 7 de febrero, por familiares de la víctima y agentes encargados de la investigación, respectivamente, fuesen humanos.
Sin embargo, Wálter Espinoza aseveró que los encontrados por un baquiano el 11 de febrero, al parecer, sí eran compatibles con los de un ser humano.
Entre las partes encontradas hay un cráneo, parte de la pelvis y la cadera. Además había cabello, así como las tennis que usaba la joven el día que desapareció y un pantalón de mezclilla.
Ahora solo falta comparar los restos con muestras del ADN de la familia para confirmar que se trata de la joven.
Este jueves, en las diligencias participaron agentes judiciales, jueces, funcionarios de la Policía Municipal de San Pablo, así como la fiscala adjunta de Heredia, Tatiana Chaves Lavagni.
Además del vehículo, se decomisaron teléfonos celulares y prendas de vestir que, al parecer, tienen rastros de sangre.
Para Espinoza no hay duda de la participación de estas personas cinco personas en los hechos, ya que todos tuvieron roles establecidos en los hechos.
De acuerdo con el Ministerio Público, a los adultos se les investiga por un delito de homicidio calificado, mientras que el caso de los menores se tramita de forma paralela por el mismo delito.
La fiscala Chaves dijo que los aprehendidos serán llevados a la Fiscalía para su indagatoria y, posteriormente, se pedirá prisión preventiva en la audiencia de solicitud de medidas cautelares ante el Juzgado Penal de Heredia.
Información actualizada a la 4:14 p. m. con más datos del caso.