Un peón agrícola está detenido como sospechoso de arrebatar una bebé de tres meses a su madre y luego de matar a la niña cuando la lanzó a un río donde la menor se ahogó. La captura del individuo, de apellidos Murillo Vargas y de 35 años, la hicieron oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) el jueves anterior en la comunidad de El Ceibo en Buenos Aires de Puntarenas.
El caso ocurrió el lunes anterior en la comunidad indígena de Las Rosas, en Salitre de Buenos Aires. Cerca del mediodía, la madre de la bebé regresaba de visitar a unos familiares y decidió pasar a una finca donde labora el papá de la menor.
Ella se trasladó en un vehículo particular que la dejó cerca del sitio donde estaba el padre de la niña. A partir de ahí, debía continuar a pie. Según relató la mujer a la Policía Judicial, en el camino un sujeto desconocido la interceptó, la amenazó y la golpeó con una piedra en la cabeza. El golpe presuntamente la dejó inconsciente durante algunos minutos y, cuando despertó, su hija no estaba.
La mujer acudió a una casa vecina donde contó lo ocurrido y la familia llamó al Sistema de Emergencias 9-1-1. De inmediato, oficiales de la Fuerza Pública, miembros de la Cruz Roja y voluntarios comenzaron la búsqueda.
La mañana del martes 2 de noviembre, encontraron a la bebé fallecida. El OIJ informó de que se presume que el agua arrastró a la niña aproximadamente un kilómetro. Inicialmente, el cuerpo no presentaba golpes y se presume que murió ahogada.
El jueves anterior, con base en el relato de testigos, los agentes detuvieron a Murillo en El Ceibo, por incumplir medidas de protección que le había impuesto la compañera sentimental.
Gracias a esa captura, las autoridades judiciales efectuaron una diligencia de reconocimiento con la madre de la bebé, la cual resultó positiva. Ella lo identificó como el hombre que le arrebató la bebé. El OIJ informó este sábado de que paralelamente, Murillo fue trasladado al departamento de Medicina Legal en Pérez Zeledón para someterlo a exámenes médicos, pues este sujeto forcejeó con la mujer y a parecer presentaba algunas lesiones.
Asimismo, el viernes los agentes de la Policía Judicial en coordinación con la Fiscalía de Buenos Aires allanaron la casa del papá de la bebé en busca de indicios que ayuden a aclarar lo sucedido, pues no se tiene todavía cuál será el móvil de este homicidio.
Este nuevo suceso conmovió otra vez al cantón de Buenos Aires, que en los últimos meses ha sido escenario de hechos violentos, como son los constantes intentos de homicidio en la disputa por tierras en las regiones indígenas, así como el asesinato de seis personas el pasado 17 de octubre en un rancho en Llano Bonito de Brunka.
Asimismo, se le debe sumar la extraña muerte de José Navarro Rojas de 64 años, que apareció muerto luego de que se quemara la casa donde se encontraba en la ribera del río Ángel, unos cinco kilómetros al norte de la comunidad de Santa Rosa, en el distrito de Brunka. Este lugar está aproximadamente a kilómetro y medio de donde ocurrió la masacre en Llano Bonito.