En cuestión de 22 horas, entre el sábado y el domingo, siete personas fueron asesinadas en cinco diferentes ataques con arma de fuego a lo largo del país. Se trata de un incremento inusual, tomando en cuenta que cada día, en promedio, se registran dos homicidios.
El primero en esta seguidilla de crímenes fue reportado cerca de las 11 p. m. del sábado, en Río Jiménez de Guácimo, Limón. El fallecido, identificado como Yeison Rodríguez Obregón, habría sido engañado por dos personas en una motocicleta para que saliera de la vivienda, que también funcionaba como búnker para la venta de droga.
Cuando empezaron a disparar, Rodríguez salió en bicicleta. Intentó huir y la dejó botada para correr por la calle principal, pero las balas lo alcanzaron. El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) contabilizó entre 24 y 28 heridas de bala, principalmente en su cabeza, cuello y cara.
Posteriormente, a las 7 a. m. del domingo, en el costado norte del Parque Nacional en San José, fueron encontrados dos jóvenes dentro de un vehículo con varios impactos de bala.
Al parecer, el hecho inició en el distrito Merced, donde dos hombres en motocicleta dispararon varias veces contra un vehículo en el que iban tres personas. El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) indicó que, según la versión preliminar, los tres ofendidos se montaron a otro automóvil para ir hacia el Hospital Calderón Guardia, pero minutos después chocaron contra un poste eléctrico.
Los dos fallecidos fueron identificados como Yohan Arley Lobo, 22 años, y Dilan Ruiz Arley, de 21 años, mientras que el herido es de apellido Román, cuya edad no trascendió.
El tercer ataque a balazos ocurrió cerca de las 7:40 p. m., en La Eulalia de San Diego, en La Unión de Cartago, donde quedaron un hombre muerto y dos personas heridas.
La víctima fatal, identificada como Madrigal Vargas, de 30 años, recibió disparos en la cabeza, abdomen y brazos, mientras que dos personas resultaron heridas, un hombre de 20 años, de apellido Brenes, con un balazo en el tórax, y una mujer de 37 años, de apellido Brenes, con una herida en el hombro.
Madrigal fue trasladado en un vehículo particular, con escolta de la Fuerza Pública, al Hospital Calderón Guardia, donde fue declarado fallecido. Los dos heridos, considerados por el OIJ como víctimas colaterales, fueron atendidos en el Hospital Max Peralta, en Cartago.
El fallecido era hermano de Bayron Rodolfo Madrigal Vargas, joven de 28 años asesinado el 18 de julio del 2019 en esa misma comunidad, tras recibir al menos diez disparos, desde un auto en movimiento, en su cabeza, tórax y piernas.
Otro doble homicidio fue reportado a las autoridades al ser las 8 p. m., en Jacó de Garabito, Puntarenas. Un hombre de 47 años, de apellido Rivera, y una mujer de 54 años, apellidada Araya, fueron acribillados por dos hombres cuando llegaban a su casa en automóvil. Los dos cuerpos quedaron adentro del vehículo.
Por último, poco antes de las 9 p. m. fue asesinado un joven de 23 años, de apellidos Barquero Mata, por un ataque con arma de fuego cerca de un supermercado en Guayacán de Guácimo, Limón. Fuentes policiales detallaron que, al parecer, Barquero estaba en un búnker de droga, donde llegaron dos gatilleros en moto a buscarlo y le dispararon al menos siete veces en su cabella, cuello, codo y tórax.