Un sujeto de apellidos Torres Fonseca, de 41 años, quedó detenido luego de permanecer oculto durante una semana en la que la Policía Judicial lo buscaba como sospechoso de matar a una mujer de 40 años, en Alajuelita, y herir a la hermana de esta última.
Los agentes lograron la captura el viernes anterior en Calle Fallas de Desamparados, donde Torres se encontraba escondido, indica un comunicado de prensa del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Los hechos que se le atribuyen ocurrieron en barrio la Aurora de San Felipe, Alajuelita, el 8 de agosto. Presuntos problemas personales entre las mujeres baleadas y las hijas de Torres, llevaron a este último a una aparente venganza.
Ese día, la mujer fallecida, identificada como Mónica Espinoza Rodríguez, había discutido con las hijas de Torres en vía pública.
Poco después de que se calmaron los ánimos, una hermana de Mónica, llamada Kilsia, salió a realizar un mandado a una pulpería, momento en que supuestamente se encontró con Torres, quien al parecer le reclamó por la discusión que tuvo Mónica con sus hijas y le disparó varias veces.
Al escuchar los disparos, Mónica, la hermana mayor de Kilsia, salió de la casa y fue ahí cuando en apariencia Torres también le disparó en varias ocasiones.
Ambas mujeres fueron impactadas en al menos tres oportunidades, principalmente en tórax-abdomen y zona lumbar.
Mónica se mantuvo varias horas en la sala de operaciones del Hospital San Juan de Dios, donde falleció al día siguiente.
Por su parte, Kilsia, de 27 años, quien es madre de cuatro menores, aún se mantiene en dicho centro médico muy delicada de salud.
Según la información brindada por testigos a los oficiales del OIJ, al momento de recibir los disparos, Kilsia tenía en sus brazos a uno de sus hijos, de un año.
El Juzgado Penal del Tercer Circuito Judicial de San José ordenó dos meses de prisión preventiva en contra de Torres Fonseca a solicitud de la Fiscalía de Hatillo.