Las provincias costeras de Limón y Puntarenas, dos de las menos pobladas del país, tuvieron en el 2020 una cantidad de homicidios que solo fue superada por San José.
Ambas rebasaron a Alajuela, Heredia y Cartago que, pese a ser mucho más pobladas, terminaron con menos asesinatos en el año recién concluido.
Según el OIJ, la tasa de homicidios en nuestro país ronda el 11,2 por cada 100.000 habitantes y todavía está lejos de la cifra ideal, pero al aplicar el cálculo a Limón, la tasa se triplica (33).
Según las estadísticas del OIJ, en San José fueron asesinadas 162 personas, en Limón 128 y en Puntarenas 84.
El hecho de que Limón cerrara el año con 128 víctimas, deja ver como esa provincia, con aproximadamente la cuarta parte de la población de San José, solo tuvo 34 homicidios menos. En San José habitan más de 1,6 millones de personas, mientras que en Limón son más de 460.000.
Por su parte, la provincia de Puntarenas llegó al tercer lugar con 84 asesinatos, de los que más de la mitad (43) se concentraron en el cantón central.
Los homicidios dolosos, o sea, perpetrados de forma deliberada, constituyen el principal parámetro internacional para medir el nivel de violencia de un país.
Ajustes del narco
En San José las barriadas de Pavas, así como La Carpio y León XIII fueron las que más hechos de sangre presentaron.
En Limón los poblados de Corales, Cieneguita, Limoncito, Moín, Pacuare, Villas del Mar y los Lirios, así como Limón 2000 y Liverpool son de los que tuvieron acción policial por homicidios.
En el litoral Pacífico fueron las barriadas de Chacarita, El Roble y Barranca las que más pusieron en efervescencia las calles, donde quedaron decenas de asesinados.
Según las autoridades, de los 569 asesinatos del 2020, unos 300 fueron por venganzas y ajustes de cuentas y casi un centenar por riñas, siendo esas las dos principales causas.
El 54% del total de homicidios se concentraron en solo 10 cantones del país, principalmente en los cantones centrales de las provincias de San José, Limón, Puntarenas y Alajuela.
En San José, solo cinco de los 20 cantones se libraron el año pasado de asesinatos. En Alajuela hubo siete sin ese tipo de delito, en Guanacaste, cuatro quedaron exentos en Heredia tres y en Cartago dos.
En Limón y Puntarenas todos los cantones presentaron ese tipo de criminalidad.
Según el director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Wálter Espinoza, la cantidad de droga que circula en el mercado mueve a las organizaciones criminales a luchar por controlar el mercado y eso repercute en el aumento de los homicidios.
Esas luchas generan balaceras en las que algunas veces se ven involucradas personas que nada tienen que ver con el conflicto, o sea víctimas colaterales.
Según el OIJ, en el 2020 el número de víctimas colaterales aumentó en relación con el 2019, pues pasó de 3 a 14 personas.
Uno de esos casos ocurrió en febrero en Paraíso de Cartago, cuando una adulta mayor, de 76 años, salió a hacer un mandado y fue alcanzada por un proyectil en Llanos de Santa Lucía.
La mayoría de estos ajustes los cometen motorizados que interceptan a las víctimas a cualquier hora del día. El 70% de los homicidios (396) fueron perpetrados con arma de fuego.
Por último, el OIJ en sus registros revela que de los 82 cantones del país, 21 quedaron sin asesinatos este año. Hojancha de Guanacaste tiene más de 15 años sin homicidios, pues el último ocurrió en febrero del 2005.