Un trabajador descubrió este jueves por la mañana los restos de dos hombres en una finca cafetalera en Aquiares de Santa Rosa, en Turrialba. El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmó poco después que el caso se está investigando como un doble homicidio.
Con este hallazgo, el país llegó a los 200 asesinatos cuando aún no se ha completado el primer trimestre del año. Esto representa un aumento de 10 crímenes en comparación con el mismo período del 2023, que fue considerado el año más violento con 907 víctimas.
En las imágenes difundidas en redes sociales se observa que uno de los fallecidos llevaba puesta una pantaloneta negra. A su lado había un bolso y una patineta negra con llantas naranjas. El otro cuerpo estaba en un estado de descomposición mucho más avanzado, ya que solo se podían apreciar restos óseos, algunas prendas de vestir, una zapatilla deportiva y un bolso.
Según datos preliminares proporcionados por la Policía Judicial, las víctimas serían un joven de 16 años y otro adulto de 22 años, de apellido Blandón, quienes estaban desaparecidos desde este mes de marzo.
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A mediados de mes, el mismo OIJ publicó la fotografía de Lenin Scory Blandón Pérez, quien fue visto con vida por última vez el 14 de marzo, en el mismo cantón. Sin embargo, corresponderá a los científicos forenses confirmar si se trata de la misma persona.
De los 12 homicidios registrados este año en Cartago, 10 tuvieron lugar en Turrialba. Esto implica que ese cantón ya igualó la cantidad de asesinatos que acumuló en todo el 2023.
El año pasado, el cantón azucarero experimentó un aumento sin precedentes en la violencia, con un total de 10 homicidios, una cifra significativamente superior a la del año anterior más violento, que fue el 2022, cuando se reportaron cuatro crímenes de este tipo. La disputa entre bandas limonenses ha extendido sus conflictos a este cantón, que se encuentra entre los diez más extensos del país, con 1.643 km2, y limita con los seis cantones de Limón, lo que facilita la movilización de grupos y mercancías ilegales por diversas vías.
Entre las organizaciones que luchan por el control de territorios en Turrialba se encuentra la dirigida por Alejandro Arias, conocido como “Diablo”, que ejerce una gran influencia en Limón y Pococí, además de una extensión de la banda liderada por alias La Mancha, quien se encuentra actualmente en prisión.