El cuerpo de una mujer fue extraído de su tumba por un grupo de vándalos, quienes profanaron el cementerio de Pacayas, en el cantón de Alvarado, Cartago. El hecho ocurrió la madrugada de este domingo 22 de diciembre y se encuentra bajo investigación por parte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
El comisionado Erick Calderón Hernández, director Regional de la Fuerza Pública en Cartago, informó que tres nichos fueron violentados durante el ataque, aunque dos de ellos se encontraban vacíos.
“Esto ocurrió al amanecer domingo, llamaron a la Fuerza Pública y a la policía local, y se verificó que se trataba de una violación de tumbas. Se realizó una inspección en compañía del personal del cementerio, se verificó que habían tres tumbas que habían sido violentadas, en dos de ellas no habían cuerpos y en otra extraen el cuerpo.
“Se activó el protocolo por ser un delito de acción pública y se le informó al OIJ para que se presentara e hiciera la inspección como tal”, detalló Calderón.
El artículo 207 del Código Penal establece penas de prisión de entre seis meses y hasta un año por la profanación de cementerios y cadáveres, o en su lugar, de veinte a cincuenta días multa.
Restos reubicados con presencia de la familia
Guiselle Montenegro, presidenta de la Junta Administrativa del cementerio, explicó que si bien el cuerpo de la mujer fue extraído de la tumba, nunca salió del cementerio. Indicó que los familiares estuvieron presentes durante la reubicación de los restos y confirmaron que el cuerpo se encontraba completo.
“Es muy lamentable que en un pueblo como este se den estos hechos y se eche por la borda el trabajo de un equipo que realiza su labor ad honorem. Solo Dios sabe lo que cuesta sostener este camposanto, ya que las ventas no se dan siempre y hasta este año es que la Junta pudo por primera vez, después de 43 años de estar este cementerio en funcionamiento, lograr manejar los fondos que le corresponden”, manifestó Montenegro.
Daños adicionales
Además de las tumbas profanadas, los vándalos irrumpieron en la capilla del cementerio, donde rompieron ventanales y una imagen de la Virgen del Carmen. También esparcieron vidrios y lodo en varias secciones del camposanto. Sin embargo, se constató que no sustrajeron objetos de valor.
El comisionado Calderón indicó que la familia afectada fue orientada para presentar la denuncia correspondiente, mientras las autoridades continúan con las indagaciones para identificar a los responsables.