Un hombre de 44 años, asesinado la noche del martes cuando viajaba en un automóvil marca BMW en San Juan de La Unión, Cartago, vivió los últimos 25 años rodeado de violencia.
Se trata de Esteban Sandí Miranda, conocido como Chino Sandí, a quien mataron de un balazo en la cabeza el martes a las 8:35 p. m. cuando circulaba por la calle paralela a la autopista Florencio del Castillo, frente a la instalaciones del Grupo Q.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó de que dos individuos en una motocicleta se le aproximaron y, presuntamente, el que viajaba en la parte trasera le disparó en varias ocasiones, pero solo una bala lo impactó en la cabeza y le provocó la muerte.
Sandí, al percatarse del ataque, al parecer intentó poner en reversa su carro para huir, pero el vehículo cayó en una zanja, lo que facilitó el accionar de los homicidas.
Se presume que en ese momento Esteban Sandí se dirigía para su casa ubicada en Villas de Ayarco. El auto que manejaba está a nombre de una mujer.
Aunque por el momento se desconoce el móvil del homicidio, la Policía Judicial no descarta que se deba a una pugna con algún grupo organizado que distribuye drogas en los barrios al sur de San José.
Conflicto con la ley: el robo de siete vehículos en un día
Según los registros judiciales Esteban Sandí Miranda, oriundo de Zapote, San José, comenzó a tener conflictos con la justicia a la edad de 19 años, cuando se le vinculó, el 1.º de diciembre de 1996, con el robo, en un solo día, de siete vehículos en Curridabat, San Pedro de Montes de Oca, Zapote y Quesada Durán.
Por esos hechos, el Tribunal de Juicio de Goicoechea, en un proceso abreviado, lo condenó el 13 de mayo de 1998 a descontar 12 años de prisión.
Luego el mismo tribunal, pero el 12 de abril del 2000, le impuso otros 15 años de cárcel por cinco delitos de robo agravado, un delito de robo agravado en grado de tentativa, un delito de hurto agravado y un delito de homicidio calificado en grado de tentativa, en perjuicio de varios ofendidos.
En mayo del 2011, cuando Sandí se encontraba preso en el centro penitenciario La Reforma, se produjo un intento de fuga en el cual murieron dos reos y un custodio. En ese momento ocurrió un motín en el penal que incluyó incendio de colchones y muebles.
Por esos hechos, Sandí Miranda fue acusado de incendio, daños y favorecimiento de evasión, pero en marzo del 2015 el Tribunal de Juicio de Alajuela lo absolvió y quedó en libertad.
Pocos meses después de estar libre, el Ministerio Público lo investigó (sin detenerlo) por el delito de tentativa de homicidio y robo agravado por un incidente que se produjo el 3 de mayo del 2016 en el restaurante Meylin, en Plaza González Víquez, en el cual resultó herido de bala un hombre de apellido Guadamuz.
Posteriormente, lo capturaron el 4 de diciembre del 2017 por tentativa de homicidio y robo agravado. En esa ocasión el Juzgado Penal de Goicoechea, a cargo de Carolina Lizano Salazar, le impuso seis meses de prisión preventiva, que tuvo varias prórrogas. Sin embargo, en un juicio celebrado el 31 de mayo del 2019, lo absolvieron de esos cargos.
El 13 de junio del 2018 cuando Esteban Sandí se encontraba preso, se produjo una balacera en la entrada principal al centro penal La Reforma en San Rafael de Alajuela.
En esa ocasión un sujeto intentó dispararle a una mujer, cuya identidad nunca trascendió, que recién había ingresado a un vehículo estacionado. Ella visitó La Reforma para una visita conyugal con Sandí.
La mujer salvó su vida porque el arma del atacante se encasquilló y el guardaespaldas de ella, que estaba dentro del vehículo, salió y disparó en varias ocasiones al atacante, que huyó del lugaren un carro.
Salpicado por crímenes
El 8 de junio del 2018, al detener a varios sospechosos de asesinar a dos hombres y una mujer el 2 de diciembre del 2017 en una vivienda ubicada en San Rafael Abajo de Desamparados, San José, el OIJ mencionó que Sandí Miranda era de uno de los imputados, pero que no lo detuvieron porque estaba en prisión preventiva.
Días después, la Fiscalía Adjunta de Desamparados indicó que la causa que se tramitaba contra de Sandí era por un presunto delito de favorecimiento real, y no directamente con el triple homicidio.
“Con la prueba recabada en conjunto con el OIJ, esta Fiscalía no logró obtener evidencia que le permitiera vincular directamente al sujeto con la muerte de las tres personas, pero sí con el delito señalado anteriormente, por lo que lo acusó y solicitó la apertura a juicio de la causa 17-032909-0042-PE”, comunicó el Ministerio Público.
Sandí obtuvo la libertad en una fecha no determinada, pero debía usar tobillera electrónica, la cual le quitaron en junio del 2020.
El 16 de julio del 2020, oficiales de la Fuerza Pública lo detuvieron en Quepos, Puntarenas, cuando viajaba en un vehículo y portaba una arma de fuego sin los respectivos permisos.
Sobre ese caso, la Fiscalía de Quepos y Parrita comunicó: “Se abrió una investigación en contra del señor Sandí. Al sospechoso se le tomó la declaración indagatoria y, tras un informe policial elaborado por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), se corroboró que cumple con todos los arraigos procesales (laboral, familiar y domiciliar), por lo que no se requirieron medidas cautelares en su contra”.
Ese incidente ocurrió solo cinco días después de que asesinaran a balazos a dos jóvenes de 18 y 23 años cuyos cuerpos fueron lanzados a un guindo en la comunidad de Navarro del Socorro de Dulce Nombre de Cartago. Presuntamente, una de las víctimas tenía una relación sentimental con Sandí. El doble homicidio todavía no ha sido aclarado.