El viernes, una noticia conmocionó al país: el cuerpo de Yuliana Ureña, una joven de tan solo 19 años y vecina de San Roque, Ciudad Quesada, San Carlos, fue hallado en un terreno baldío de la localidad.
Al parecer, el crimen tuvo lugar la noche del jueves, después de que la joven se dirigiera a la casa de una amiga para entregarle un regalo, antes de asistir a clases en el Centro Integrado de Educación de Adultos (Cindea).
Cuerpo hallado por familiares
Los familiares de Yuliana encontraron sus restos a las 6:30 p. m. del viernes. Desesperados, la buscaron desde el jueves. Según las autoridades, el cadáver fue descubierto a 400 metros del centro comercial El Encuentro, cubierto con bolsas de basura y parcialmente desvestido, lo que llevó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de San Carlos a considerar la posibilidad de una agresión sexual como móvil del crimen.
No obstante, los restos no mostraban lesiones visibles, por lo que será necesario esperar los resultados de la autopsia para determinar con precisión la causa de la muerte. Además, junto al cuerpo se encontraron el teléfono celular y los audífonos de la víctima.
Principal sospechoso
El domingo por la mañana, un hombre de 39 años y de apellido Acuña fue detenido por agentes del OIJ en Naranjo, Alajuela. Este individuo es el principal sospechoso del asesinato de Yuliana y fue identificado gracias a las imágenes captadas por cámaras de seguridad proporcionadas por vecinos.
En las grabaciones aparentemente se observa cómo el sujeto esperó a Yuliana cerca del terreno, forcejeó con ella hasta que cayó, y luego la arrastró hacia el lote, abandonando la propiedad minutos después.
El jefe de la Policía Judicial de San Carlos, Nils Rojas, comentó que este caso “se sale de los parámetros” en San Carlos, ya que no se registraron hechos similares en la zona.
Comunidad de luto
El crimen consternó a la comunidad, que organizó una vigilia y una marcha desde el Liceo de San Carlos —donde opera el Cindea en horario nocturno— con el propósito de exigir justicia para Yuliana. La marcha culminó en el lugar donde se encontró el cuerpo de la joven.
En el terreno, los asistentes, vestidos de blanco, colocaron un altar con flores y velas, y permanecieron en vigilia acompañados de canciones.
Roxana Quirós, madre de la joven, dejó un mensaje en su cuenta de Facebook dirigido al responsable de quitarle la vida a su hija: “A usted, ¡esa persona que le arrancó la vida! ¡Me la arrebató! Pídale a Dios por su alma, porque usted le quitó la vida a una muchacha estudiosa, amorosa, ¡como ella no existe otra!”, escribió.
“¡Mi pequeña! ¡Mi niña de mis ojitos bellos! ¡Mamita te va a extrañar hasta el último respiro de mi vida! ¡Sé que con la ayuda de Dios y la tuya, donde estés, vamos a salir!”, añadió.
Por su parte, José Garos Alvarado, padrastro de la joven, expresó en una conversación con La Nación que sabe que las autoridades están haciendo todo lo posible, pero hizo un llamado a que “se esfuercen más”. El abuelo de Yuliana pidió a las autoridades que no dejen en libertad al sospechoso, ya que podría representar un peligro para otras personas.
La noche del domingo, los familiares organizaron otra marcha y vigilia por Yuliana en el mismo lugar. A partir de las 9 p. m. se llevó a cabo la velación, y el funeral se llevará a cabo este lunes. Mientras tanto, las autoridades trabajan en esclarecer el caso y demostrar la culpabilidad del principal sospechoso.
Conmovedor mensaje
Justo un día antes del ataque, el miércoles 20 de setiembre, Yuliana publicó un emotivo mensaje en su cuenta de Facebook, dedicado a su hermana y su sobrina bebé. “Desde que tengo memoria me has cuidado, protegido y enseñado a ser mejor persona, mi mejor versión. Y ahora verte ser madre, es el regalo más bonito que el universo pudo darme”, escribió la joven.
“Las amo con toda mi alma, y el alma nunca muere”, concluyó. En su publicación, incluyó una foto de su hermana y su bebé. Para los seres queridos de Yuliana, este mensaje se convirtió en la despedida de la joven, quien lo escribió sin saber que unas horas después su vida sería arrebatada.
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