Una inspección realizada en la urbanización Valladolid, en Los Guido de Desamparados, reveló que al menos 22 familias deben evacuar sus viviendas pronto ante el riesgo de un colapso.
Esta es la principal recomendación girada por la autoridades del municipio local, la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), el Ministerio de Salud y el de Vivienda, luego de una inspección realizada en la zona este miércoles por la mañana.
Como primera medida, cuatro familias aceptaron voluntariamente la recomendación de abandonar sus propiedades y se fueron a sitios más seguros.
En total, en la actualidad, una 44 casas muestran signos de debilitamiento, pero, de momento, solo para la mitad se dispuso la evacuación.
Desde que la tormenta tropical Nate afectó a nuestro país en octubre del 2017, muchos vecinos de esta urbanización en Los Guido perdieron la tranquilidad.
Aquella vez un deslizamiento de 50.000 metros cúbicos de tierra a escasos 20 metros de la zona poblada fue a dar al cauce del río Jorco, lo que también generó una emergencia en la parte baja, al obstruir el paso del agua y formar una laguna que amenazaba varios poblados.
Varios postes del alumbrado público sucumbieron y se cerró el paso por la calle que quedó a orillas de la corona o parte alta del deslizamiento en urbanización Valladolid.
Volviendo a la actualidad, las fuertes lluvias de este mes y la amenaza de que a raíz del Fenómeno de La Niña los aguaceros sean muy intensos en lo que resta del año, aumentan la zozobra de muchos lugareños.
De acuerdo con Gilberth Jiménez, alcalde de Desamparados, la saturación de suelos obligó a canalizar las aguas residuales y pluviales para evitar que llegaran a la zona donde ocurrió el desbordamiento del 2017 y que la tierra siguiera cediendo.
Expresó que por causas que los geólogos analizan y que pueden obedecer a una falla sísmica o saturación de suelos, el terreno sigue inestable.
“Hay casas con agrietamientos, columnas reventadas, puertas que no abren y una serie de daños estructurales que ponen en riesgo a las familias”, explicó.
Esa urbanización se levantó hace unos 25 años en la zona y actualmente varias manzanas de terreno están afectadas.
La idea es desalojar y no permitir más construcciones de estructuras ahí. Incluso Jiménez dijo que el municipio rechazó un permiso que meses atrás solicitó una empresa para levantar viviendas en una zona cercana.
El funcionario pidió ayuda a la CNE y al Ministerio de Vivienda para reubicar a las familias afectadas, pero admitió que por ahora no existe una respuesta inmediata.
Sin una salida para los afectados
"Esas familias deben optar por algún proyecto futuro de vivienda para el cual puedan calificar. No es fácil. A veces se piden muchos requisitos y en tiempos de la pandemia por covid-19, muchas personas ni siquiera tienen empleo”, agregó el alcalde.
Dijo que, de momento, no hay ningún riesgo para quienes viven en las zonas bajas por las que pasa el río Jorco, pues el daño es en otro sector.
Hace tres años, cerca de ahí, la municipalidad tuvo que intervenir de emergencia para drenar la laguna que se formó en el río Jorco, justo en un año donde La Niña generó lluvias excesivas en todo el país.
La acción a tiempo en estas circunstancias puede significar la diferencia entre la vida y la muerte, como sucedió en el cercano barrio Las Palmas, en el sector ocho de Los Guido en agosto del 2017.