Aunque en Costa Rica le decimos tornado a un cono de fuertes viento que destecha casas y arranca árboles, los tornados no son propios de regiones tropicales. Los que hemos visto recientemente en videos caseros se llaman torbellinos y su frecuencia es mucho mayor en la temporada de lluvias. Sin embargo, como dato curioso, su impacto ocurre en seco, es decir arrasan regiones en las que no está lloviendo.
Así ocurrió en los casos ocurridos el 5 de agosto en Santa Bárbara de Heredia, el 14 de setiembre en Santo Domingo de Heredia, el 15 de setiembre en Los Ángeles de Cartago y el pasado 9 de octubre en el centro de Heredia.
Empecemos por descartar los tornados, los cuales no se registran en zonas tropicales, es decir, son de otras latitudes, principalmente en Estados Unidos, explicó la especialista Gabriela Chinchilla, del Instituto Meteorológico Nacional (IMN). Aquel país sufre los embates de hasta 1.200 tornados al año, un promedio de 56 muertes anuales y millonarias pérdidas en agricultura, ganadería e infraestructura.
Sin embargo, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de los Estados Unidos, aclara que también pueden formarse en ciertas regiones de Australia, Nueva Zelanda, África, Europa, Asia y Suramérica. Estos desarrollan velocidades desde 105 km/h y avanzan decenas kilómetros destruyendo edificaciones completas a su paso. Lo hemos visto en estados como Texas, Oklahoma o Kansas.
En cambio, los torbellinos son fenómenos atmosféricos muchísimo más débiles y más estacionarios y cuando se desplazan su trayectoria es errática, pero restringida al área de la nubosidad. En promedio, se desplazan a 40km/h y su diámetro de impacto es de apenas 30 metros, según mediciones que se han realizado en las zonas afectadas.
Pese a lo anterior, los torbellinos tienen fuerza para destechar casas, derribar árboles o sus ramas y afectar postes de luz. Es imposible pronosticarlos y mucho menos saber el lugar donde impactarán.
Un vistazo a sus características
Estos fenómenos son el resultado de la confluencia de dos masas de aire de diferente temperatura y humedad, con aire cálido en las capas inferiores y frío en las superiores.
FUENTE: IMN || INFOGRAFÍA / LA NACIÓN.
La nube del cumulonimbo es requisito para que haya un torbellino.
El cumulonimbo es una nube densa y potente, de considerable dimensión vertical, en forma de montaña o de enormes torres. Son las nubes que originan las tormentas, tornados, granizos; así como trombas o columnas de agua que se elevan en el mar y que también pueden causar daños en navíos, islas o litorales. La base se encuentra a una altura entre 700 y 1.500 metros, mientras que la parte superior llega a entre 24 y 35 kilómetros de altura.
Contienen gotas de agua, cristales de hielo y granizo. La turbulencia en los alrededores de estas nubes es muy fuerte, motivo por el cual los aviadores deben evitarlas.
De acuerdo con las estadísticas del IMN, en Costa Rica se estima que los torbellinos se forman con más frecuencia después de las 3 p. m., en la Gran Área Metropolitana (GAM) y su incidencia aumenta entre mayo y octubre, en plena temporada lluviosa.
Según el meteorólogo Juan Diego Naranjo, como ahora hay más facilidad de registrarlos con cámaras de teléfonos celulares, pareciera que son más frecuentes, pero siempre han existido, lo mismo que la caída de granizos que es muy usual en este tiempo.
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Colaboró en esta información Vanessa Loaiza.