Una familia de cuatro personas murió durante un incendio registrado en Moravia este miércoles en la madrugada.
Mientras el fuego se propagaba, las víctimas no encontraron las llaves de la casa, resguardada por robustos portones y candados para protegerse de los ladrones.
El Cuerpo de Bomberos informó de que la emergencia se registró a las 2:57 a. m. en una vivienda ubicada 200 metros al este del Colegio de Ingenieros Agrónomos, en Los Colegios de Moravia.
Las víctimas son Mario Avilés Sasso, abogado de 56 años, su esposa Silvia Fernández Aragonés, de 47, así como los dos hijos de ambos, una joven de 24 años, identificada como Ariadna Avilés Fernández e Ignacio Avilés Fernández, de 20.
Luis Diego Fernández, primo de Silvia, dijo que ellos habían reforzado los portones porque en el pasado se les habían metido un par de veces a la casa.
Agregó que los bomberos trataron de abrirlos, pero se dificultó mucho y no se pudo hacer más.
Personal de Ingeniería de Bomberos determinó en horas de la tarde que la causa del incendio fue una falla eléctrica.
El análisis de elementos recolectados en la escena les permitió llegar a esa conclusión.
El Cuerpo de Bomberos reveló que la falla en sistemas y aparatos eléctricos representan el 45% de las causas de incendios en Costa Rica.
Los cuerpos de la víctimas fueron localizados en la parte trasera de la vivienda, en un patio interno. Según el reporte de Bomberos, fue muy difícil ingresar a la propiedad de 126 metros cuadrados, por la gran cantidad de rejas y portones que tiene.
El perro de la familia, de raza labrador, también murió y yacía junto a los cuerpos de los adultos en la esquina trasera izquierda del patio
Los dos jóvenes quedaron en la esquina trasera derecha.
Los primeros en detectar el fuego fueron el guarda de seguridad del barrio, así como los vecinos más cercanos.
Alexa Campos, quien vive diagonal a la casa quemada, se mostró muy conmovida por lo ocurrido. Explicó que cuando escuchó los gritos de don Mario que decía “Ayuda, por favor, ayuda”, levantó a su familia y llamaron al 9-1-1.
Vivienda de cemento se convirtió en un horno
Bomberos insisten en usar detectores de humo.
FUENTE: CUERPO DE BOMBEROS. w. s. INFOGRAFÍA / LA NACIÓN.
Ella pensó que estaban robando, pero al percatarse del incendio corrió con los demás vecinos a tratar de ayudar, pero no hubo forma.
Kattia Vargas, otra lugareña, dijo que a las 2:58 oyó al señor clamar por auxilio. “El gritaba que llamaran a los Bomberos, todos estábamos afuera, tratamos de tirar agua, pero las llamas eran demasiado altas y una manguera no hacía nada”, sostuvo.
“Algunos oyeron a Silvia diciendo que no encontraba las llaves, pero yo solo lo escuché a él”.
Rememoró que eran vecinos sumamente cordiales. Formaban parte del chat de la comunidad y eran muy allegados a la iglesia católica.
“Los bomberos llegaron rápido. Antes de eso tratamos de sacar mangueras, pero ninguna llegaba hasta la casa, solo la del vecino de al lado”, que fue insuficiente, puntualizó.
Héctor Chaves, director de Bomberos , explicó que a las 3:03 a. m. llegó la primera unidad y el fuego estuvo controlado 20 minutos después.
Encontraron la casa completamente en llamas. Hubo que usar motosierras para abrir los portones del frente, que estaban reforzados, y se ingresó con mangueras de presión para extinguir el fuego y evitar que se propagara a las casas vecinas.
“Cuando se llega hasta el fondo de la casa, lamentablemente en el patio se encuentran cuatro víctimas. Al lado derecho los dos jóvenes y a la izquierda los padres de familia. Ellos buscaron refugiarse en un patio bastante pequeño y con paredes de cuatro metros de alto.
"Prácticamente es muy difícil que las personas se puedan salvar, porque por la radiación de la casa y los gases tóxicos convierten eso en un horno”, manifestó Chaves.
Los gases tóxicos son los primeros que alcanzan las vías respiratorias y hacen que la persona muera.
Agregó que el fuego empezó en el área de sala - comedor.
Hay algunas versiones que dicen que ellos no encontraron las llaves para poder salir y que incluso así se lo dijo la madre de familia a una familiar vía telefónica", dijo Chaves.
El incendio fue atendido por dos unidades extintoras, dos de apoyo y una de rescate de Guadalupe, la central y Tibás.
Hasta este miércoles se registran nueve personas fallecidas en incendios, entre ellas dos niños. Del total de fallecidos cinco han sido mujeres y cuatro hombres.
En enero una madre y dos de sus hijos fallecieron en un incendio en Alajuela.
“Muy buena amistad”
German Marín, director de la Policía de Tránsito, llegó al lugar del siniestro en Moravia, pues fue compañero de trabajo en el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) del abogado fallecido, Mario Avilés.
“En el 2014 trabajamos juntos. Estuvo alrededor de dos años y medio en el MOPT. Fue presidente del consejo de Personal y también fue oficial mayor. Habíamos hecho muy buena amistad extralaboral y compartíamos mucho", indicó.
“Yo venía a la casa de él, a veces para fin de año. Además de ser una persona muy espiritual, era doctor en Derecho. Solíamos conversar también de fútbol, pues era seguidor de la Liga”, dijo.
Recordó que actualmente trabajaba como asesor en la Asamblea Legislativa.
Tres semanas atrás se habían reunido y constantemente compartían mensajes positivos por el chat.
Entregados a Dios
Zayda Salazar Mora, otra allegada a la familia, destacó que la pareja participaban activamente con los franciscanos y con el hogar de ancianos San Francisco de Asís, “lo veían como su misión social”, dijo.
Añadió que el Colegio Saint Francis tiene una orden de laicos y ahí también colaboraban mucho, pues estaban consagrados y servían como lectores y en otros servicios los sábados y domingos en las diferentes misas.
La última vez, se saludaron en la celebración del Miércoles de Ceniza. “Eran personas muy serviciales, de esas vidas que nos parece imposible que se hayan segado”, dijo.
Añadió que Silvia era una mujer de mucha oración. "En la casa tenía un aposento pequeño con varios crucifijos y ese era su espacio para hablar con Dios. Murieron cuando más entregados a Dios estaban”, dijo Salazar.
Afirmó que ella tenía un servicio de catering y Mario era abogado.
Estudiante de periodismo
Ignacio Avilés era estudiante de periodismo de la Universidad Internacional de las Américas. En su perfil de Facebook allegados se mostraron consternados por el deceso del muchacho.
"Se fue con su familia. Poeta y colega, corazón y creatividad. Fuerza y sabiduría, paz y fortaleza para los más cercanos. ¡Un abrazo solidario!, dice Eduardo Gardela.
Una compañera de estudios, Gaudy Castro, escribió en el perfil de Ignacio "Estoy segura que tu luz, el ritmo de tus canciones y la lírica de tus escritos brillarán por siempre donde quiera que estés. ¡Buen viaje amigo! Aquí, ya te extrañamos.
Estudiaba y trabajaba.
Ariadna Avilés, de 24 años, era estudiante de Administración de Empresas y laboraba en el centro de llamadas de Amazon, Calle Blancos.
En su perfil de Facebook se muestra como amante de las mascotas.