Los fuertes aguaceros de este domingo dejaron decenas de casas anegadas en Quircot y la Lima, pertenecientes al distrito de San Nicolás, lo mismo que en los distritos de Llano Grande y Tierra Blanca.
El alcalde Mario Redondo expresó, durante el recorrido por Quicot, que hubo daños porque muchos puentes ya son obsoletos, no tienen capacidad hidráulica y requieren sustitución, por lo que desde hace tiempo están en trámite las nuevas estructuras que ayuden a un mejor paso del caudal. También están a la espera de los permisos de dragado que gestionan con la Dirección de Geología y Minas y la Dirección de Aguas del Ministerio de Ambiente y Energía.
Por ahora no ha sido necesario habilitar albergues, pero la evaluación sigue porque hay familias en Llano Grande que perdieron todos sus bienes y las casas están muy dañadas. El puente que está 400 metros al norte de la plaza de la Lima tampoco dio abasto y varias casas cercanas quedaron anegadas, principalmente por el desbordamiento de la quebrada Amapola y el río la Lima.
Redondo dijo que hay decenas de familias con algún tipo de afectación por las lluvias en todo el cantón y que ya el comité municipal realiza las inspecciones para solicitar a la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) el apoyo logístico y las valoraciones.
Gerald Aguilar, jefe de la Policía de Tránsito de Cartago, dijo que desde hace cinco años no habían visto la delegación con problemas de anegamiento tan grandes, donde incluso entraron sedimentos a toda la estructura ubicada en la entrada de Taras.
Explicó que los oficiales tuvieron que sacar con escobas y mangueras el barro y que documentación y equipos electrónicos se dañaron pues fue mucho el material que fue a parar ahí con partículas de cemento y concreto. Se quedaron sin agua potable y con baldes de agua llovida tuvieron que limpiar a como pudieron la enorme cantidad de material que llegó a una altura de 20 centímetros.
La CNE dijo que en Cartago eran más de 20 viviendas anegadas y también colapsó un tubo madre en La Lima, además se reportó el colapso de un muro en el cementerio de Tierra Blanca, entre otros daños.
En el cantón de El Guarco también hubo desbordamiento de ríos y fuertes lluvias. La CNE también fue alertada por inundaciones en San Andrés de León Cortés.
Efectos de la onda 35
Según Roberto Vindas, meteorólogo del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), la cercanía de la zona de convergencia intertropical y la llegada de la onda tropical N.º 35 reforzarán las precipitaciones en el país desde este domingo por la noche e incluso el lunes, debido a la inestabilidad que este disturbio dejará en su trayectoria hacia el Pacífico de nuestro país.
El fenómeno favorecerá el aumento de la cobertura nubosa y lluvias variables en el Caribe con montos máximos entre 30 y 60 litros por metro cuadrado (milímetros, mm) en periodos de seis horas, es decir, aguaceros de moderados a fuertes. También se esperan precipitaciones en el eje montañoso, así como en los alrededores del golfo y la península de Nicoya. En el resto del país se proyectan lluvias intermitentes con posibilidad de aguaceros localizados en el Pacífico central y sur.
Por esta razón, la CNE mantiene alerta amarilla, por la amenaza de afectación significativa en todo el país, excepto el Caribe que tiene alerta verde o preventiva.
Entre el viernes y la tarde de este domingo la CNE registra 57 alertas por inundaciones, principalmente en playas del Coco situadas en Sardinal de Carrillo, así como en Cañas, León Cortés y El Guarco de Cartago. También en Corredores, cantón fronterizo con Panamá y en varios puntos del Valle Central como San Pedro de Montes de Oca, Santa Bárbara de Heredia y la cabecera de la provincia de Cartago.
En todo el Pacífico sigue la alerta verde por alto oleaje. El sábado en la tarde varias embarcaciones ancladas en playa Ocotal, cantón de Carillo, Guanacaste, sufrieron vuelcos y daños estructurales por la fuerza de las olas.
IMN vigila sistema en el Caribe norte
Aunado a todo lo anterior, un sistema de baja presión frente a las costas de Nicaragua y Honduras, en el Caribe, tiene posibilidad de convertirse en ciclón hacia finales de la próxima semana. Sin embargo, los modelos numéricos del Centro Nacional de Huracanes aún muestran una considerable incertidumbre.
El IMN monitorea este potencial sistema e informará oportunamente cualquier cambio en las proyecciones y posibles afectaciones indirectas en el país. Un sistema similar originó, el 24 de setiembre, la tormenta tropical Helene, la cual luego se fortaleció como huracán y se dirigió hacia el norte, dejando más de 50 muertos en Florida, Estados Unidos.
Colaboró la corresponsal Keyna Calderón