Alrededor de 450 casas anegadas, 11 con afectación estructural, cuatro de ellas con pérdida total y daños en la escuela de Barrancas y el Liceo de Tobosi, resumen el impacto de las torrenciales lluvias registradas el pasado lunes en El Tejar de El Guarco, Cartago.
A ello se suman afectaciones en caminos, comercios y el puente que comunica el centro de Tobosi con el poblado de Barrancas, el cual presenta socavamiento en el bastión izquierdo, debido a un cambio ocurrido en el curso del río Purires. Lo anterior obliga a ejecutar acciones de primer impacto para evitar daños mayores mientras se interviene a fondo el cauce.
Rebeca Morera, del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), detalló que la estación meteorológica ubicada en Barrancas, distrito de Tobosi, registró 56 litros de agua por metro cuadrado o milímetros (mm) en un periodo aproximado de una hora. Un aguacero normal suele generar 30 litros en seis horas.
Aunque en algunas ocasiones esa estación ha registrado hasta 100 milímetros, ha sido en un tiempo más prolongado. La intensidad de las lluvias del lunes rebasó la capacidad de manejo de los ríos Purires, Coris, Tablón y Barrancas.
A lo anterior se sumó la saturación del suelo provocada por las precipitaciones registradas en los días anteriores en ese sector de Cartago. La combinación de ambos factores provocó que las cuencas de los ríos y de varias quebradas cercanas se desbordaran y anegaran todo a su paso, al bajar como avalanchas de lodo, ramas y piedras.
Lidier Esquivel, jefe de la Unidad de Investigación y Análisis del Riesgo de la CNE, señaló que la zona presenta diversas características que la hacen vulnerable a inundaciones. Afirma que es un valle muy plano, conformado por suelos arcillosos que limitan la capacidad de filtración, por lo que la correntía del agua en la superficie suele ser importante. De igual manera, tiene varios ríos que pueden crecer y desbordarse a su alrededor.
Morera manifestó que un aumento en los vientos alisios a partir de este martes y que se extenderá durante los próximos días, traerá una tregua en las condiciones lluviosas en el Valle Central y Guanacaste.
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Millonarias pérdidas
Alejandro Picado, presidente de la CNE, afirmó que gran parte de las afectaciones se produjeron en El Guarco, donde residenciales enteros fueron anegados, como el condominio Valle Ilios en Coris de Quebradilla, Cartago, y Sendas del Sol, en San Isidro de El Guarco, como se evidenció en tomas aéreas.
Este martes la CNE distribuyó ayudas de primera respuesta a las personas más necesitadas, como agua potable, alimentos, espumas y cobijas. El personal del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) comenzó las valoraciones para apoyar a las familias afectadas en barrios como Corazón de Jesús, Barrancas, Purires, sector Cementerio, urbanización Los Geranios, Barrancas, Pueblo Nuevo, calle Los Vargas y Tablón, entre otras.
Esa entidad confirmó que las familias damnificadas pasaron la noche con allegados, de manera que no fue necesario habilitar albergues.
La maquinaria municipal realizó a lo largo del día labores de limpieza de calles y caminos de los lugares donde ocurrieron desbordamientos. El Consejo Nacional de Vialidad (Conavi), junto con el área de ingeniería de la Municipalidad, revisaron este martes cuatro puentes y estructuras impactadas.
Por su parte, el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) distribuyó agua potable en cisternas, ya que las tuberías de algunos acueductos colapsaron, lo cual dejó sin agua a buena parte de los pobladores durante la noche del lunes y la mañana del martes. La Junta Administrativa del Servicio Eléctrico Municipal de Cartago (JASEC) rehabilitó el sistema eléctrico que resultó averiado por las corrientes de agua.
Eda Gerardina Quesada, directora de la Escuela Barrancas, Tobosi, afirmó que el día de la emergencia evacuaron a los 45 estudiantes que se encontraban en ese momento en las instalaciones. Este martes estaban evaluando los daños ya que el día anterior quedaron sin electricidad y había lodo cerca del aula de cómputo y otros sitios.
En el distrito de Quebradilla, cantón de Cartago, también hubo afectación menor en algunos caminos y viviendas, por lo que también se realizó una inspección en la zona.
Impacto severo
El alcalde de El Tejar, Víctor Arias Richmond, comentó al mediodía del martes ya estaban rehabilitados los servicios de electricidad y agua potable en las zonas afectadas de Tobosi, San Isidro y El Tablón. Insistió en que cualquier medición se queda corta ante el volumen de agua que en poco tiempo cayó este lunes. Fue algo “inmisericorde y exagerado”, sostuvo.
En cuanto a los condominios, aseguró que la administración de esos complejos siempre daba mantenimiento al cauce del río Purires, pero, recientemente, surgió un problema con algunos finqueros que no permitieron el acceso para esas labores, de modo que esta vez el agua se desbordó y entró a las casas, aunque las afectaciones fueron menores y ellos mismos se encargaron de la limpieza.
También afirmó que la enorme raíz de un árbol bloqueó el paso del agua bajo uno de los puentes de Tobosi, lo cual contribuyó al desbordamiento del río Purires que aguas abajo se une con el Coris, el cual también rebasó su cauce.
Afirmó que la mayor afectación se debió a que los ríos arrastraron material y troncos hasta los puentes de caja que quedaron obstaculizados. El agua desbordada por las calles tomó fuerza en las pendientes y generó los daños. Agradeció a los municipios vecinos de Paraíso, Cartago y Oreamuno por aportar equipo para la limpieza de cauces, caminos y alamedas de barrios. En estos últimos sitios había gran cantidad de muebles, colchones y enseres dañados.
Por su parte, la CNE afirmó que enviará este miércoles personal de Geología a Nisperal de Tobosi, para inspecciones en el terreno.
La Parroquia Santo Cristo de Esquipulas, en Tobosi, así como el movimiento de Guías y Scouts, realizan una campaña para recoger alimentos no perecederos, agua, ropa y zapatos, artículos de higiene personal y artículos de limpieza que se destinarán a los afectados. Se contabilizan 32 familias con algún nivel de afectación, la mayoría con el daño o pérdida de enseres.