Este año se podrían formar entre 11 y 13 ciclones en el océano Atlántico, y hasta seis de ellos podrían alcanzar la categoría de huracán, según los datos divulgados este viernes por el Instituto Meteorológico Nacional (IMN).
Sin embargo, estas cifras son menores a los 16 ciclones, 10 de ellos huracanes, que hubo durante el 2017.
Aunque las cifras parecen ser más benévolas para este 2018, Juan Carlos Fallas, director del IMN, hizo hincapié en que esa variación no debe llevarnos a bajar la guardia, porque con uno solo de estos huracanes que se forme cerca de nuestro país, ya es suficiente para crear condiciones de emergencia.
"El hecho de que sean menos, no significa que el país no tenga que estar preparado, al contrario, tenemos que estar atentos y tener en nuestro ADN la experiencia del huracán Otto y la tormenta Nate, porque en cualquier momento pueden volver a suceder", explicó.
Con respecto a las lluvias de este año, dijo que podrían ser ligeramente menores que el año pasado, porque existe la posibilidad de que se fortalezca el fenómeno de El Niño, a finales del 2018.
Lo que si tienen claro los científicos es que a mediados de este 2018 desaparecerá el fenómeno de La Niña, que nos afecta desde setiembre del 2017.
La Niña se caracteriza por un enfriamiento de la temperatura en el océano Pacífico tropical, que repercute con más lluvias en los países como el nuestro, que están al norte del Ecuador. Al desaparecer La Niña, da paso a una fase neutra.
Contrario a La Niña, el fenómeno de El Niño implica un aumento en la temperatura del océano y mayor sequía al norte del Ecuador.
El IMN tendrá en julio datos más actualizados para determinar con certeza si se consolida o no el Fenómeno de El Niño en el último trimestre, para lo cual emitiría una alerta por las implicaciones que eso conlleva para la producción agropecuaria, la pesca y el estado del tiempo, entre otros.
Transición a estación lluviosa
El IMN informó de que la estación lluviosa de este año se iniciará en el Pacífico sur el 1.° de abril y de ahí se extenderá progresivamente al Pacífico central, llegando al Valle Central entre el 11 y el 15 de mayo.
Posteriormente se extenderá por la península de Nicoya y el Pacífico norte, de modo que el 25 de mayo ya estarán consolidadas las lluvias en todo el país.
Juan Carlos Fallas, indicó que en abril, mayo y junio se espera que las precipitaciones estén dentro de los márgenes normales, pero es posible que en los tres meses siguientes el Pacífico y el Valle Central tengan lluvias más bajas que el promedio, debido a que desaparece el efecto de La Niña.
La influencia de ese fenómeno contribuyó a que el 2017 fuera un año extremadamente lluvioso en el Valle Central y el Pacífico norte.
De igual manera, en enero y febrero de este año las lluvias fueron más altas en todo el país, excepto en el Pacífico norte y en los cantones de Upala, Los Chiles y Guatuso.
Dos frentes fríos en enero, debido al fuerte invierno en el hemisferio norte, ocasionaron temporales fuertes, condiciones más ventosas y temperaturas más bajas que el promedio.
LEA MÁS: Intensos ciclones y fenómeno de La Niña dieron giro de 180 grados al clima local en el 2017
Para el Caribe y la zona norte la climatología es otra, ya que en esa región hay dos picos lluviosos, uno entre los meses de junio, julio y agosto y otro en diciembre, enero y febrero.
Lecciones aprendidas por CNE son fortaleza
El presidente ejecutivo de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), Iván Brenes, dijo que el embate de sequías, inundaciones, sismos y ciclones pusieron a prueba la capacidad de respuesta de todo el sistema operativo ante desastres.
Afirmó que actualmente los comités de emergencias están mejor preparados para el futuro.
“Se generó un proceso de capacitación en más de 400 comités comunales de emergencia, la cual fue puesta a prueba en los diferentes eventos”, afirmó.
Brenes llamó a la próxima administración a darle seguimiento y acompañar a esos comités de Guanacaste, la zona sur, Limón y otras regiones de las más vulnerables a desastres.
También dijo que la CNE queda con recursos económicos asegurados para la atención de emergencias y que se cuenta con la logística para el abastecimiento de las 89 bodegas que tienen en todos los cantones, así como las cuatro que existen en el ámbito regional.
Brenes insistió en mejorar el financiamiento del Fondo Nacional de Emergencias, para que no dependa de los superávits de las instituciones estatales.
“Hay que buscar un mecanismo para que pueda ser abastecida de una manera constante y no depender de transferencias, máxime en un contexto de déficit fiscal como el que afronta el país, en el que las transferencias no corresponden a la realidad de lo que la Comisión tiene que atender”, acotó.
Admitió que muchas municipalidades actualizaron los planes reguladores, luego de eventos adversos, pero es un proceso al que le falta mucho todavía.
Dijo que la CNE cuenta con nuevos estudios que serán insumos para que los gobiernos locales generen el ordenamiento territorial a través de planes reguladores.
Señas de cambio climático
- En los últimos tres años el clima mundial registra las temperaturas más cálidas de las que se tiene registro con 1,1 y 1,2 °C por encima de la era preindustrial.
- El 2017 fue el año más calido y como particularidad está el hecho de que no hubo fenomeno de El Niño.
- La vertiente del Caribe de nuestro país tuvo en los últimos dos años déficit de lluvias, pero en enero y febrero de este 2018 ha tenido un considerable superávit que unas regiones superó el 75%.