EscucharUn nuevo cono piroclástico formado por material que proviene del magma, como ceniza, bombas (piedras) y lapili (piedras milimétricas), se formó en la orilla sur de la laguna que está en el cráter activo del volcán Poás.
La estructura la descubrieron el pasado 28 de abril especialistas del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori) durante una visita de una hora, en la cual también lograron ver la creación de nuevos playones y tres conductos menores, en la misma laguna, por donde salieron erupciones freáticas.
Eliécer Duarte, del Ovsicori, dijo que esta es una demostración más de que el volcán Poás es capaz de transformarse de muchas maneras en pocos días y que de continuar con la actual energía, pues persiste las fuertes emanaciones de gases y la actividad sísmica, es factible que pronto tenga nuevas modificaciones.
Entre tanto, Mauricio Mora, de la Red Sismológica Nacional (RSN), dijo que por el momento ese cono piroclástico permanece abierto, es decir, permite la exhalación de gases, vapores y otros materiales.
Mientras que Raúl Mora Amador, vulcanólogo de la Universidad de Costa Rica (UCR-Preventec) explicó que el cono piroclástico se conformó en el mismo lugar donde estaba el antiguo domo, el cual fue destruido por la erupción del viernes 14 de abril y que alcanzó tres kilómetros de altura.
En ese mismo lugar había surgido un primer cono piroclástico que desapareció con una erupción que se produjo el sábado 22 de abril en la noche, la cual derribó las cámaras de observación que tiene el Ovsicori y dañó parte de los equipos de midición de la actividad sísmica.
También la caída de piedras y ceniza destruyó los páneles solares que daban energía durante la noche a la cámara de la RSN, por lo que la vigilancia del volcán con la utilización de instrumentos no es continua.
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Tanto la RSN como el Ovsicori esperan este jueves tener funcionando adecuadamente los equipos. En tanto, la observación visual solamente se hace en las mañanas, por el mal tiempo y el peligro de erupciones súbitas. En el cerro del volcán Poás ha estado lloviendo durante los últimos 10 días.
El Poás tuvo un cambio importante en la actividad desde el 1.° de abril, situación que obligó a que el Parque Nacional permanezca cerrado por tiempo indefinido.
Vulcanólogos y guardaparques han descubierto elementos balísticos (piedras) a 400 metros de distancia del cráter.
Mauricio Mora dijo que el Poás en los últimos dos días se mantiene en un "estado de calma relativa", pues no ha tenido "actividad eruptiva grande".
Los vulcanólogos coincidieron en que es factible que este nuevo cono piroclástico sea destruido por alguna erupción fuerte, como la ocurrida el 22 de abril.
