Un fuerte torbellino causó daños materiales en negocios, viviendas y tendido eléctrico de las comunidades de San Josecito y Los Ángeles, en San Rafael de Heredia.
Alexander Salazar, de la central de monitoreo del Cuerpo de Bomberos, indicó que recibieron el aviso de un aparente “tornado” alrededor de las 4 p. m. de este sábado.
“Nos dijeron que era un tornado. Las unidades fueron y detectaron casas destechadas, así como tendido eléctrico en vía pública. La situación se controló muy rápidamente”, informó.
Según Salazar, en este tipo de situaciones, los bomberos verifican que no haya personas afectadas ni tendido eléctrico que obstaculice el paso en las carreteras.
Una unidad de Cruz Roja también se movilizó al sitio, pero Rita Valverde, de la oficina de comunicaciones de la institución, afirmó que no recibieron reportes de personas heridas.
“No tengo datos de eso. Me dicen que se recibió un reporte de una casa, Bomberos lo está atendiendo”, manifestó por su parte, Rebeca Madrigal, de la oficina de prensa de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
El servicio de emergencias del 9-1-1 indicó que también recibió la alerta sobre la situación a las 4 p. m.
De acuerdo con los reportes de vecinos de la comunidad de San Josecito, no hubo aguaceros antes de que pasara el fenómeno, pero sí ocurrió una lluvia con viento muy rápida luego del evento.
En videos que circularon por redes sociales, se muestran algunos cables eléctricos que explotaron por el paso del viento, un trampolín destruido en media calle y cúmulos de basura en las aceras.
Otro, logró documentar cómo la fuerza del aparente tornado destruyó el techo de un negocio llamado “Pisos y Azulejos San Josecito”, en San Rafael de Heredia.
¿Tornado o torbellino?
Aunque el Cuerpo de Bomberos lo registró como un “tornado”, en Costa Rica, este tipo de fenómenos reciben el nombre de “torbellinos”, debido a la forma en que se producen y a la manera en la que se mueve el viento.
Gabriela Chinchilla, meteoróloga del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), explicó que estos eventos ocurren cuando una columna de aire sale de las nubes en dirección a la tierra, a velocidades bastante altas.
Este tipo de fenómenos son muy rápidos, ya que duran entre uno y cinco minutos, con velocidades que inician en 40 kilómetros por hora y, en ocasiones, también se mantienen estacionarios.
La altura que alcanzan depende de la nube, pero se pueden elevar entre los 500 y 1.000 metros.
“Le llamamos torbellino para hacer la diferenciación con un tornado de esos grandes, gigantescos y monstruosos que ocurren en Estados Unidos, por ejemplo. Aquí tenemos esos súper pequeños, entonces les llamamos así”, explicó.
Los torbellinos se diferencian de los tornados porque no se genera un embudo de viento, sino solo una gran nube de tormenta, la cual tiene ráfagas de vientos descendentes muy fuertes que hasta pueden destechar casas.
“Aquí a veces se le ha llamado tornado, pero siempre es bueno hacer esa diferencia de que la escala es muy pequeña en comparación a los fenómenos grandes”, precisó Chinchilla.
Grado de destrucción
La meteoróloga señaló que estos eventos pueden ser muy dañinos porque la intensidad del viento puede alcanzar hasta 100 kilómetros por hora e impactar con mucha fuerza en las comunidades.
“Hemos tenido eventos leves de que solo levantan algunas tejas, latas de zinc de algunos techos y ramas de árboles, hasta eventos como uno del 2007 donde tuvimos en Cartago y Hatillo dos casas completamente destechadas”, dijo.
La especialista asegura que es muy complicado que se repitan con frecuencia y que es casi imposible que ocurra más de uno un mismo día, en un mismo lugar.
Además, explicó que no se pueden prever ni tampoco identificar con anterioridad los lugares en los que se van a presentar.
Según Chinchilla, en ocasiones suceden luego de mañanas muy calientes y tardes con nubes de gran desarrollo vertical, pero no es 100% preciso asegurarlo.
"No son pronosticables porque son tan pequeñitos y se forman tan rápido que no se pueden prever. Lo que sí se puede hacer es sospechar que eventualmente puede ocurrir alguno, en el sentido de que se vieron ciertas características.
“Pero poder discernir que efectivamente va a haber uno o que haya alta probabilidad de que ocurra, o saber en qué lugar, no se puede hacer”, manifestó.
Recomendaciones de seguridad
La principal recomendación para cuando ocurren este tipo de eventos, es no quedarse en exteriores, porque los vientos son muy fuertes y normalmente traen escombros como astillas de madera o rótulos de negocios.
Luego, si se está dentro de una casa o algún otro tipo de infraestructura, lo mejor es alejarse lo mayor posible de las ventanas, porque los mismos escombros podrían romperlas y causar lesiones en las personas.
Según el IMN, lo más favorable es ubicarse en un sitio de la vivienda que sea lo más cerrado posible, como por ejemplo el baño, que en la mayoría de casos cumple con esta característica.
Colaboraron la corresponsal Shirley Vásquez y el periodista Manuel Avendaño