Pérez Zeledón y Puntarenas. Los fuertes gritos de la enfermera María del Rocío Venegas Chavarría, quien estuvo perdida tres días en el cerro Chirripó, permitieron que los socorristas la encontraran.
La mujer fue localizada ayer a las 11 a. m., en el valle de las Morrenas, a unos ocho kilómetros del albergue base Los Crestones, donde se le vio por última vez.
Cuando fue divisada por las autoridades de búsqueda, la mujer se encontraba de pie, haciendo señas para lograr ser vista.
Venegas salió la tarde del lunes a realizar un paseo por uno de los senderos, pero se extravió.
En el alberge notaron su desaparición hasta el martes al mediodía, cuando la enfermera tenía que abandonar la habitación.
Lucha por sobrevivir. Ronald Chan, director regional del Área de Conservación, dijo que el abrigo que portaba la mujer, el quedarse en el mismo lugar durante estos días y sus habilidades como enfermera le permitieron mantenerse con vida.
“Ella nunca perdió las ganas de vivir y siempre estuvo gritando, tratando de pedir auxilio y es así como la brigada terrestre la logra ubicar, lo que permitió que ella siguiera con vida fue la ropa y el tipo de calzado. Además, llevaba chocolate e incluso se hidrató con agua que recolectó”, explicó Chan.
La mujer relató al funcionario que cuando sentía que bajaba su temperatura corporal, hacía ejercicios para calentarse.
Cuando Venegas fue hallada, se encontraba en un buen estado de salud, incluso ella misma caminó hasta el albergue en el cerro Chirripó, donde miembros de la Cruz Roja la atendieron.
El descenso de la mujer fue pospuesto para este viernes a las 6 a. m. debido a las condiciones del clima.
Ayer en la tarde, las autoridades aún no habían determinado si el traslado se realizaría en helicóptero o por vía terrestre.
Fiesta de bienvenida. La angustia de Alicia Chavarría, madre de la enfermera, terminó al recibir una de las mejores noticias de su vida: hallaron a su hija con vida.
Chavarría fue una de las primeras en enterarse. “Yo le pedí mucho a Dios para que mi hija apareciera con vida, nunca desistí y siempre tuve la esperanza y fe de que ella estaba viva”, relató.
Guiselle Chavarría, hermana de la enfermera, dijo que ella y otros familiares le están preparando a Rocío una fiesta de bienvenida en Puntarenas, su ciudad natal.
“Tras la angustia que pasamos, ahora solo queda esperar a que se recupere y regrese a la casa para recibirla como se lo merece, le haremos una fiesta y una rica comidita y esperamos que pase los últimos días de sus vacaciones con nosotros”, expresó.
Marybeth Soto, otra de las hermanas de Venegas, dijo que la enfermera aprovechó su periodo de vacaciones para cumplir su sueño de escalar el Chirripó.
“La última vez que hablé personalmente con Rocío, me dijo que quería ir al cerro Chirripó; mi hermana cumplió su sueño”, narró.