Dos jóvenes hallados sin vida el domingo, en la habitación de un motel, murieron asfixiados en forma accidental por el humo proveniente de su propio vehículo.
Así lo informó ayer el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), después de que se realizaron las autopsias a los cuerpos del muchacho -de 21 años-, de apellidos Valverde Chinchilla, y su novia, de 17, apellidada Vega.
Aparentemente, ambos llegaron en la madrugada del domingo al motel El Retiro, en San Rafael Abajo de Desamparados, San José.
La pareja ingresó a la habitación, pero dejó encendido el motor del vehículo pickup que guiaba Valverde, al parecer porque no estaba en muy buena condiciones.
Como dejaron la puerta abierta, el monóxido de carbono que genera la combustión del motor se introdujo en el cuarto donde ellos departían, provocándoles primero la pérdida de consciencia y, luego, la muerte por asfixia.
Empleados del motel encontraron a las víctimas a las 4 p. m. del domingo cuando fueron a avisarles que ya habían pasado las 12 horas que pueden permanecer los clientes en ese lugar.
"El personal abrió la cochera y salió mucho humo del vehículo encendido. La habitación estaba abierta", informó Edwin Miranda, jefe policial de Desamparados, San José.
La pareja estaba vestida sobre la cama.
Futuro
Valverde y Vega eran novios desde hace varios meses y, según comentó la familia de ella, pensaban casarse en febrero.
Por esta razón, descartaron que la pareja haya muerto en una acción intencional.
"Se querían mucho, salían mucho y ya tenían casa", dijo una pariente de la joven.
Ambos estuvieron en la casa de la abuela de Valverde, el sábado en la mañana. Según la señora -cuya identidad pidió no ser revelada-, su nieto le dio un abrazo muy efusivo.
Luego salieron en el carro del padre del muchacho a hacerle un mandado al patrón del joven a Varablanca de Heredia, lugar adonde aparentemente nunca llegaron.
El domingo al mediodía ambas familias daban por desaparecidos a los muchachos hasta que llegó el aviso.
"Mi hija venía de la iglesia y me dijo que le preocupaba porque él no aparecía", relató con tristeza la abuela.
Inicialmente, las autoridades manejaban otro nombre de la muchacha pues ella se había llevado el bolso de su hermana, por lo que se creyó que era esta la fallecida.