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Un incendio dejó ayer sin techo a 18 familias que habitaban en una antigua mueblería convertida en casa de cuartos de alquiler, la cual estaba ubicada en calle Los Azofeifa, en Guachipelín de Escazú, San José.
En la conflagración, desatada a las 11:33 a. m., también resultaron dañadas en forma parcial otras tres viviendas colindantes con la destruida por las llamas.
El fuego fue controlado por los bomberos a las 12:03 p. m. Aunque ayer todavía no se había determinado la causa del incendio, investigadores del Instituto Nacional de Seguros (INS) manejaban dos posibilidades: una, que fue un corto circuito, y la otra, el recalentamiento de un electrodoméstico que dejaron conectado.
Edificio transformado
La estructura que se incendió estaba construida con perlin y las paredes exteriores eran de zinc.
Inicialmente se usó como mueblería, pero desde hace dos años fue convertida en una cuartería.
Para eso se construyeron con madera dos plantas, donde se acondicionaron 22 cuartos, explicó Seidy Espinoza Navarro, propietaria del inmueble.
Las habitaciones eran alquiladas especialmente por personas de origen nicaragüense, quienes pagaban unos ¢40.000 por mes.
La construcción tenía dos portones de entrada y ayer solo se observaba un medidor de corriente eléctrica, el cual, al parecer, operaba para todos los locales.
Aunque 18 de los 22 cuartos estaban rentados, cuando comenzó el fuego solo había cinco personas dentro de las habitaciones.
Ledis Patricia Ríos Botano, una de las personas que estaba dentro, dijo que el fuego salía de la parte alta, en un cuarto donde no había nadie.
"No pude hacer nada; quería sacar el tele y el VHS, pero el humo era demasiado", expresó Ledis, quien solo logró salir con la ropa que vestía: una camiseta, un pantalón corto y medias.
Incontrolable
Las llamas se extendieron con gran rapidez, dijo María Inocencia Azofeifa, una vecina.
"La gente lloraba y gritaba, pero no se podía hacer nada", agregó Azofeifa.
Cuando llegaron los bomberos el fuego se había extendido a la casa de Lílliam Arias Álvarez, una de cuyas paredes internas resultó afectada por las llamas.
Igualmente, consumió buena parte de la vivienda de Carlos Carvajal Carballo, donde quemó dos cuartos y la cocina.
Asimismo, informaron las autoridades, el fuego afectó el techo de la vivienda propiedad de Greivin Solano Vargas.
Ninguna de las construcciones dañadas tenía seguro contra incendio, de acuerdo con lo que dijeron los propietarios.
Luis Salas, del Cuerpo de Bomberos, dijo que enfrentaron problemas para llegar al sitio de la conflagración porque las calles son muy angostas, además de que no había agua.
Para subsanar el problema, llevaron un cisterna que abasteció a las tres unidades extintoras que combatieron el fuego.
