Un adolescente de 17 años fue asesinado a balazos la noche de este martes por un aparente ajuste de cuentas en Alajuelita de San José. El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) indicó que el muchacho tenía cinco heridas por proyectil de arma de fuego en pecho, cara y axila derecha.
Los hechos ocurrieron a eso de las 8:30 p. m. en el distrito de San Felipe. Cuando el menor se dirigía hacia su casa, un sujeto lo interceptó y, sin mediar palabra, le disparó en varias ocasiones.
De inmediato, el sospechoso se dio a la fuga y hasta este miércoles no había mayores detalles de quién es el responsable. El caso quedó en manos de agentes judiciales, quienes se encargaron de levantar el cadáver para remitirlo a la Medicatura Forense donde será sometido a una autopsia. También continuarán con las averiguaciones para determinar el móvil del homicidio y dar con el paradero del agresor.
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En otro hecho violento, un hombre identificado como Máximo Vargas Fernández, de 67 años, fue asesinado la misma noche del martes en Rosario Pacuare de Pérez Zeledón.
El OIJ detalló que los vecinos escucharon disparos y al salir encontraron el cuerpo del adulto mayor tendido en la vía pública, con un impacto de bala en la pierna izquierda.
Según la pesquisa preliminar, el hombre había ido en moto a la casa de un amigo y cuando regresaba camino a su vivienda fue víctima de un ‘bajonazo’. La motocicleta fue hallada a unos 100 metros del lugar de los hechos con un disparo en el tanque, por lo que se presume que los sospechosos intentaron huir con ella y no lo lograron.
Según la página web del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), Vargas residía en San Cristóbal de Baru, Pérez Zeledón, era padre de dos hijos de 23 y 21 años; se casó por primera vez en 1980 y, tras enviudar en el 2000, se volvió a casar en 2011.
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Costa Rica logró superar la cifra de 102 asesinatos en los primeros 44 días del 2023, un crecimiento considerable si se toma en cuenta que para alcanzar ese número se demoraron 57 días en el 2022 y 63 en el 2021.
Las autoridades reconocen que la alta incidencia de homicidios se atribuye, principalmente a ajustes de cuentas o líos relacionados con drogas. Expolicías, exministros y exinvestigadores judiciales claman por mayores presupuestos para los cuerpos de vigilancia y, mitigar así la ola criminal.