Este lunes 4 de enero se inicia en los Tribunales de Cartago un debate contra cinco personas sospechosas de conformar una organización dedicada a la producción y comercialización de aceite, cera y otros productos derivados de marihuana.
Ese grupo fue detenido el 31 de enero del 2019, tras varios allanamientos de la Policía de Control de Drogas, y aunque ese día cayeron seis personas, solo cinco van a juicio.
Un hombre de apellido Cortés, de 42 años, hijo de la primera ministra de Salud de la presente administración, Giselle Amador, no aparece entre los imputados, según un boletín del Departamento de Prensa y Comunicación Organizacional del Poder Judicial.
Esa entidad no reveló la razón por la cual Cortés no está convocado al debate, programado para terminar el 8 de enero.
Las personas imputadas son una mujer de apellidos Redondo Ramos, así como cuatro varones apellidos Bermúdez Molina, Bastos Herrera, Pizarro Cartín y Owen Strauss.
El supuesto líder era Cortés, quien según la Policía contaba con el apoyo de las otras cinco personas que irán a juicio este lunes.
A los cinco imputados, el Ministerio Público les atribuye el delito de producción y comercialización de droga.
La investigación de este caso inició en abril del 2018, luego de una denuncia confidencial que recibió la Policía de Control de Drogas (PCD), la cual revelaba la ilegal venta y cultivo de esa droga.
Los operativos se realizaron en una bodega en La Unión, además de cinco casas ubicadas en Cartago, Heredia y San José.
Esa vez la Policía decomisó unos $3.100 en efectivo, celulares, documentos de interés financiero y tarjetas de débito y crédito.
El informe que llegó a la PCD indicaba que, en apariencia, los imputados se dedicaban a alquilar casas para producir marihuana en ambientes controlados, y extraer así el aceite y la cera de las plantas.
Al parecer, empacaban los derivados en ampollas o cartuchos; luego, aparentemente, los vendían a precios que oscilaban entre ₵30.000 y ₵100.000.
Una lujosa casa en residencial Cariari, en Belén de Heredia, servía como bodega para sembrar la marihuana hidropónica y escondía un laboratorio en el cual fabricaban aceite y cera de esa hierba, para consumir en vaporizadores.
El grupo también tenía siembras en Tres Ríos de La Unión, Cartago, Santa Ana en San José y en Guápiles, en Limón.
Por el momento, se desconoce cuánto dinero obtenía la organización de manera mensual, pero se estima que eran ingresos millonarios.
En varias de las casas utilizadas por el grupo, la PCD decomisó plantas de Cannabis sativa (marihuana), así como documentos y otras evidencias que se incluirán al expediente.
Para las autoridades policiales Cortés era el líder y Pizarro era su mano derecha. Este último era el encargado de cultivar, asistir y procesar la marihuana para obtener la cera y el aceite en los distintos laboratorios de la organización.
Bastos, de 37 años, tiene expediente por robo agravado. Al parecer era el encargado de la recolección de la droga directamente de los laboratorios y realizar entregas a los clientes.
Owen, un estadounidense de 69 conocido como Jeff o El Gringo, aparentemente aportaba dineros para el desarrollo y mantenimiento de los laboratorios, participaba activamente en el cultivo, cuido y mantenimiento de las plantas y de los equipos, así como en el procesamiento de la droga.
La mujer de apellido Redondo, quien tiene nacionalidad cubana - estadounidense, junto con el tico Bermúdez cuidaban y cultivaban marihuana en ambientes controlados dentro de una casa.
La mujer también realizaba entregas de droga a otros miembros de la organización y a terceros referidos por Pizarro Cartín, mientras que Bermúdez almacenaba el producto terminado y lo distribuía a terceros compradores.