Dos mujeres que estaban en el Hotel La Mansion Inn la noche del asesinato de María Luisa Cedeño, aseguraron a los jueces haber visto al entonces dueño del hotel, Harry Bodaan, caminando sin ayuda la mañana después del hecho. Las declaraciones se dieron este miércoles en el Tribunal Penal del Segundo Circuito Judicial de San José, en Goicoechea.
Las dos testigos se hospedaron en la habitación 10 del hotel, ubicado en Quepos de Puntarenas, del 18 al 20 de julio del 2020. Cedeño fue asesinada el mismo 20 de julio, y el caso trascendió un día después, cuando el cuerpo fue encontrado envuelto en una cobija, ensangrentado y con varios golpes.
Estas afirmaciones contradicen la defensa del abogado de Bodaan, Hugo Navas, quien ha sostenido durante el juicio que su cliente tenía dificultad para movilizarse al momento del crimen, debido a una operación en las rodillas.
El mismo Bodaan manifestó este martes, en su tercera declaración ante los jueces, que él estuvo con su esposo Danilo Obando las 24 horas antes del crimen y además, le hubiera sido imposible cometer este acto por su condición de salud.
“Por el sufrimiento de diferentes enfermedades y operaciones recientes, no tenía la condición o capacidad siquiera de haber tenido participación en este crimen”, había dicho el empresario, quien es uno de los tres imputados de este caso, junto al bailarín Teodoro Herrera y el administrador Luis Carlos Miranda.
Las testigos, además, afirmaron haber escuchado a alguien bajar el breaker antes de que se cortara la electricidad en el hotel cerca de las 2 a. m.
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Después de esto, le pidieron a un empleado en la recepción que les ayudara con el corte eléctrico, pero él, en lugar de revisar si había algo malo, solo se quedó observando la habitación.
“Ellas nos cuentan sobre las condiciones del hotel, la seguridad que presentaba, algunos daños en las puertas, cómo tuvieron que cambiarlas de habitación porque una puerta no cerraba”, indicó el abogado de la familia de Cedeño, Alfonso Ruiz.
Según la defensa de Miranda, existieron algunas discrepancias en las declaraciones de las testigos que restan credibilidad al testimonio.
“Entraron en muchas contradicciones con lo que habían dicho antes en las audiencias (...), ninguna coincide en el momento en que escucharon los breakers, luego que vieron a Bodaan el domingo a la hora del desayuno”, indicó Silvia Zeledón, periodista en representación del defensor Erick Gatgens.
“Tercero, la segunda testigo logró ver a una persona como a las tres habitaciones de donde estaba ella porque el perrito de ella se escapó, en la declaración dijo que no lo habia podido ver porque no andaba lentes y hoy dijo que era un hombre corpulento y rapado”, detalló.
Estas fueron las testigos número 17 y 18 de los 66 que tendrá este juicio, en que se determinará si los tres acusados son culpables o inocentes por los delitos de homicidio calificado y violación calificada.
La tarde del martes finalizó la declaración de cinco días del odontólogo forense José Manuel Fernández Chaves, quien dijo el lunes al Tribunal que las dentaduras de Miranda y de Bodaan coinciden con los mordiscos encontrados en el cuerpo de la doctora Cedeño.
El debate continuará la mañana de este jueves con testimonios de amigos de Cedeño.