Santa Cruz. Dos edificios de los Tribunales de Justicia de Santa Cruz son reconstruidos, luego de resultar dañados por el terremoto de Nicoya, ocurrido el 5 de setiembre del 2012.
En el inicio de los trabajos, a partir de enero de este año, el 50% del recinto del sector sur tuvo que ser desocupado. Esta zona fue la que presentó los mayores daños estructurales.
Debido a la reparación de los inmuebles y para no afectar el servicio, el Poder Judicial alquiló un local que está a 75 metros del edificio principal de los Tribunales. En este lugar se llevan a cabo los procesos de flagrancia, juicios colegiados y unipersonales.
El administrador de los edificios, Helmer Hernández, explicó que es un sacrificio que hace no solo el personal, sino los usuarios debido a que los servicios no están concentrados en un mismo lugar, además de carecer de algunas comodidades y espacio para trabajar; sin embargo, enfatizó que se trata de una reubicación temporal.
“Se espera que finalicemos los trabajos en unos 10 meses, por ello, es que dentro de cinco meses todas las oficinas de este edificio pasarán al edificio alquilado y los que están allá pasarán al edificio ya reconstruido, mientras se hacen las mejoras al otro 50% del inmueble”, expresó el funcionario.
Hernández manifestó que el traslado de los servicios a un local alquilado obedece a que en Santa Cruz no hay un edificio con la capacidad para albergar a tantos trabajadores, es decir, 190 funcionarios, más unas 400 personas quienes diariamente usan las instalaciones. Otra de las razones se relaciona con los costos de alquiler durante estos meses.
La inversión en las obras ronda los ¢1.800 millones.
El Poder Judicial hizo una contratación directa con la empresa Navarro y Avilés.