El extranjero falleció la madrugada del 2 de junio del 2011, en el hotel La Cangreja en La Fortuna de San Carlos, luego de recibir un balazo percutido por Guevara, cuando lo sorprendió en compañía de otro joven corriendo entre los potreros del centro turístico. Ambos no acataron la orden de detenerse.
Los jueces Luis Fernando Calderón, Michael Monge y Mario Pereira coincidieron, por unanimidad, en el fallo, por lo que ordenaron la liberación de Guevara.
También declaró sin lugar las acciones civiles resarcitorias presentadas por la familia de Johnston en contra de Guevara y los propietarios del hotel.
“La culpa de lo sucedido, desde el punto de vista jurídico, la tuvo el mismo estudiante, ahora fallecido, por su actitud imprudente al correr por los potreros aledaños al hotel, en horas de la madrugada, con lo cual indujo a error”, aseguró el juez Luis Fernando Calderón.
El también juez Mario Pereira argumentó que el estudiante tuvo un comportamiento fuera de lo normal, al tratar de regresar a la habitación por potreros, en medio de la oscuridad.
El 30 de agosto del año pasado, otro tribunal condenó a Guevara a 15 años de prisión y obligó a los propietarios de La Cangreja a pagar cerca de ¢360 millones por daño moral a la familia Johnston.
No obstante un tribunal de Apelaciones dejó sin efecto el fallo y ordenó un nuevo juicio.
Johnston, quien era oriundo de Kansas, vino al país a aprender español junto a 12 estudiantes más.
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