Los tres sospechosos de asesinar a una residente alemana en un asalto registrado el 20 de setiembre del 2017 en Piedades de Santa Ana, San José, aceptaron los cargos y se acogieron a un proceso abreviado.

Hasta este viernes estaba pendiente que el Tribunal Penal de Pavas emitiera por escrito el por tanto del caso.

Originalmente, estaba previsto que el juicio iniciara el pasado 13 de abril; sin embargo, los imputados reconocieron su participación en los hechos.

LEA MÁS: Homicidas burlaron seguridad en condominio de lujo para matar alemana

Ante esto, el fiscal Ricky González Farguharson leyó la acusación, en la que explicó que un hombre de apellidos Granados Sandí, quien para el momento del crimen trabajaba como guarda del condominio en el que vivía la víctima, colaboró con otros dos sujetos, apellidados De la O Carmona y Carmona Alvarado, para la ejecución del robo, el cual desencadenó en el asesinato.

"La Fiscalía de Pavas indicó que, dentro del expediente 17-004083-0057-PE, acusó a tres hombres por el presunto delito de homicidio calificado en perjuicio de Rosmarie Bockhold de Dietrich.

"Según la investigación, los tres imputados habrían llevado a cabo un plan previamente estructurado, con el fin de sustraer artículos de valor que la ofendida tenía en su casa de habitación, donde vivía sola.

“Se sospecha que De la O y Carmona llegaron hasta el lugar a bordo de un vehículo y Granados los dejó pasar. Los tres habrían ingresado a la casa de la víctima y, presuntamente, procedieron a sustraer varios artículos como joyas, un celular y un bolso”, explicó el Ministerio Público mediante su oficina de prensa.

LEA MÁS: Guarda facilitó ingreso de homicidas a condominio en el que vivía alemana asesinada en setiembre

Además, al parecer, cuando los sujetos tuvieron los bienes en su poder, uno de los imputados, quien no fue identificado, asfixió a la ofendida.

Trascendió que esto ocurrió luego de que ella los identificara.

Después de leer la acusación, González pidió una pena de 15 años para cada uno de los hombres, que fue aceptada por la querella y los defensores de los sospechosos.

Carro apareció en Alajuela

Después de ser asesinada, el cuerpo de Bockhold, de 80 años, fue llevado por uno de los sospechosos a la cajuela del carro de la mujer.

Aparentemente, este sujeto se encargó de movilizarse hasta el costado sur del aeropuerto internacional Juan Santamaría, en Alajuela, donde dejó el vehículo abandonado.

LEA MÁS: Cuerpo hallado en vehículo cerca del aeropuerto Santamaría es de un mujer de 80 años

Posteriormente, el automóvil fue ubicado y ahí se encontró el cadáver envuelto en sábanas.

"Se cree que uno de los sospechosos se retiró en el carro en el que habían llegado y el otro acusado salió del condominio a bordo del vehículo propiedad de la víctima.

“Supuestamente, poco después el imputado regresó al lugar en ese mismo carro e introdujo el cuerpo en la cajuela del vehículo. Después, aparentemente, se trasladó hasta Alajuela, donde dejó abandonado el automóvil y huyó”, aseguró la Fiscalía.

Rosemarie Bockhold vivió en Costa Rica durante más de 30 años y tenía la condición de residente.

La familia de ella se dedica a la siembra y procesamiento de café en Palmichal de Acosta, donde tienen un beneficio cafetalero.

Captura de sospechosos

Los sospechosos de este crimen fueron capturados casi un año después de los hechos, en agosto del 2018.

Ese día se desplegaron allanamientos en Carrizal de Alajuela y Vásquez de Coronado, donde se detuvo a Carmona Alvarado, de 45 años, y a De La O, de 37.

El guarda Granados, de 26, ya se encontraba en prisión cuando se realizaron los despliegues judiciales, ya que, presuntamente, estaría relacionado con el robo de 17 armas de fuego de la delegación de Jicaral, en Lepanto de Puntarenas, el 2 de mayo del 2017.

Las autoridades establecieron el vínculo de Granados, quien trabajaba como encargado de seguridad en el condominio, mediante el análisis de las llamadas telefónicas, en las que se verificó que tenía contacto con Carmona y De La O.

Durante la investigación, el OIJ distribuyó un video donde se veía el carro de los asaltantes entrando al condominio, lo cual les permitió obtener información confidencial para decomisar el vehículo, que era usado como taxi informal.

Este caso se desarrolló dentro del expediente 17-004083-0057-PE.