Upala y Liberia. Un juez penal fue detenido ayer, a las 3:20 p. m., en Liberia, Guanacaste, como sospechoso de dejarse ¢2 millones que una persona presa canceló como fianza, para obtener su libertad.
Al implicado, Ólger León Contreras, también se le atribuye tomar ¢320.000 que un hombre le entregó por el pago de una pensión alimentaria, dinero que no trasladó, de manera inmediata, a la mujer beneficiada.
Estos dos hechos, que fueron investigados por agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), ocurrieron durante 2013 y 2014, cuando el funcionario se desempeñaba en el Juzgado Penal de Upala.
El Ministerio Público anunció que a León se le atribuyen dos delitos de peculado (distraer dineros que fueron dados a su custodia). Este delito es castigado con prisión de tres a 12 años . El funcionario judicial permanecía anoche en Liberia y hoy será indagado en la Fiscalía de Upala.
Paralelamente, la Presidencia de la Corte ordenó intervenir el Juzgado Penal de Upala y abrir un proceso administrativo contra León, comunicó el Departamento de Prensa del Poder Judicial.
No fue posible conocer la trayectoria completa de León, pero se desempeña como juez penal desde el año 2009.
Pesquisa. La investigación contra León la iniciaron agentes del OIJ de Upala, cuando un hombre, de apellido Sandoval y quien fue implicado en un delito, denunció presuntas anomalías con el dinero que pagó como fianza.
Según ese individuo, durante la audiencia para imponerle medidas, le dieron la posibilidad de quedar libre tras depositar ¢2 millones. Un amigo le prestó el dinero y se lo entregó al juez.
Sandoval dijo que tiempo después y porque debía pagar intereses por los ¢2 millones, gestionó ante el Juzgado la devolución del efectivo y, a cambio, ofreció poner a responder una propiedad, que tiene un alto valor.
Sin embargo, según el denunciante, en el Juzgado le informaron de que ese cambio no se podía hacer. El hombre dijo que luego lo citaron a varias audiencias, las cuales no se realizaron por diferentes motivos, por lo cual comenzó a sospechar de algo extraño.
Debido a sus constantes visitas al despacho judicial a preguntar por el caso, fue que un amigo suyo recibió una llamada telefónica de León, en la cual le solicitó que le dijera a Sandoval que no llegara al Juzgado a pedir la plata, porque el día que iba a depositar el dinero lo habían asaltado y, por vergüenza, no puso la denuncia.
El denunciante expuso que el juez le dijo a su amigo que en los próximos días lo buscaría para devolverle los ¢2 millones. Fue cuando Sandoval decidió acudir al OIJ.
Los agentes judiciales, cuando buscaron información en el Juzgado Penal sobre el caso del denunciante, no encontraron evidencias del ingreso del dinero.
En el caso de la pensión alimentaria, las autoridades judiciales informaron de que León le devolvió los ¢320.000 a la mujer, luego de que ella le presentara el reclamo. Esa mujer también tramitó la respectiva denuncia ante el OIJ.
Tras ejecutarse la captura del juez, oficiales del OIJ, fiscales y jueces allanaron la oficina del Juzgado Penal y un apartamento que León alquilaba en Upala.
Asimismo, ingresaron a la oficina del juez en los Tribunales de Cañas, Guanacaste, donde actualmente laboraba, así como en su casa en Liberia.
Los operativos policiales concluyeron a las 6 p. m. Se decomisaron computadores y documentación. La Policía no descarta que existan otros casos similares, por lo que se pidió a los ciudadanos que si conocen una situación anómala, acudan ante la Policía Judicial o la Fiscalía para que formalicen la respectiva queja.