El Juzgado Penal de Upala le dictó cuatro meses de prisión preventiva al director de la escuela El Higuerón, por ser sospechoso de abusar sexualmente de al menos ocho menores de edad.
Se trata de un educador de apellido Somarribas y de 47 años.
La decisión se tomó ayer cuando se llevó a cabo una audiencia a solicitud del Ministerio Público.
Según el fiscal Miguel Carranza, se solicitó prisión preventiva ante el peligro de que el imputado continúe incurriendo en el mismo delito, la vulnerabilidad de las víctimas y la obstaculización porque "se valió de su cargo para hacerles ver que él tenía el poder" y eso le permitió establecer las acciones ilícitas entre el 2014 y 2015.
"Se expuso que existía la probabilidad de reincidencia (...) Según testimonios él les decía a los padres de familia que no tenía miedo de las acusaciones porque él ya había sido absuelto y tenía el poder dentro de la institución", agregó Carranza.
La sentencia fue apelada por la defensa de Somarribas y ahora será el Tribunal de Juicio de Ciudad Quesada el que se encargará de valorar si es necesario modificar el criterio.
Error. El miércoles 15 de abril anterior Somarribas fue detenido cuando una menor de 11 años denunció que este hombre la tocó en las partes íntimas.
Sin embargo, la Fiscalía no pudo solicitar medidas cautelares porque se venció el plazo de 24 horas que estipula la ley para presentar al imputado ante el Juzgado Penal.
Entre ese miércoles y el viernes se presentaron siete denuncias más en su contra, por el mismo delito. Las víctimas afirman que Somarribas les tocaba el cuerpo y el rostro.
El sujeto salió de la zona por unos días, pero fuentes policiales afirmaron que Somarribas regresó a Upala para realizar un trámite personal en la Fiscalía.
Orlando De la O Castañeda, director de Gestión y Desarrollo Regional del Ministerio de Educación Pública (MEP), comunicó el lunes anterior que, desde el viernes, se abrió una investigación disciplinaria por este caso.
El funcionario añadió que ayer se tomó la medida cautelar de separar a Somarribas de la escuela y trasladarlo a la Dirección Regional, mientras se lleva a cabo el proceso.
El educador ya había sido procesado en el 2002 por hechos similares en otra escuela, no obstante un tribunal de Ciudad Quesada, San Carlos, lo absolvió.