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Gilbert Bell Fernández, conocido como Macho Coca, irá a prisión preventiva por tres meses como parte de la investigación conocida como Petro Coca, en la cual se investiga una presunta operación de robo agravado de combustible al poliducto de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope).
Una fuente judicial confirmó la información este domingo. El viernes pasado, las autoridades judiciales efectuaron nueve allanamientos en cuatro predios, un hotel y varias casas en Moín, Cocos y Playa Bonita, en Limón. Bell fue detenido junto con otro hombre de apellido Hide.
Ese mismo viernes, Randall Zúñiga, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), explicó que el caso comenzó a investigarse hace varios meses tras una denuncia presentada por Recope.
Se presume que, en esta operación, participaban dos organizaciones criminales distintas, lideradas por Bell, de 61 años, y Hide, de 33. Según la investigación, estas organizaciones vigilaban la llegada de barcos tanqueros a Limón, y el día en que se realizaba el trasiego de combustible del navío a los tanques de Recope, conectaban una toma ilegal en un punto intermedio.
Las mangueras ilegales pasaban por el margen derecho del río Bartolo, cruzaban el lecho y avanzaban hacia terrenos donde almacenaban el diésel o la gasolina en tanquetas, tanques plásticos o pichingas. Recope advirtió sobre el alto riesgo de contaminación si las mangueras se desacoplaban en el agua.
Además, utilizaban buses viejos y vagonetas para transportar el combustible a otras bodegas o para su distribución. En uno de los autobuses, removieron los asientos para colocar grandes contenedores de combustible. En uno de los predios de Macho Coca, incluso se halló una cisterna y una máquina expendedora de combustible, similar a las usadas en gasolineras.
Toda esta operación generaba ganancias estimadas entre ¢300 millones y ¢400 millones al mes, añadió Zúñiga.
En Costa Rica, la extracción ilegal de combustibles se castiga con hasta 15 años de prisión, pena que se equipara a la sanción impuesta por el artículo 213 del Código Penal para el delito de robo agravado.
¿Quién es Macho Coca?
Macho Coca es un empresario pesquero conocido desde hace décadas, tras múltiples arrestos, juicios y hasta comparecencias ante la Asamblea Legislativa. Nació el 2 de mayo de 1963 en Turrialba, pero se estableció en Limón, donde tiene varios negocios.
En el 2016, el Departamento de Estado de los Estados Unidos lo catalogó como un importante traficante de drogas en la costa caribeña de Costa Rica.
En febrero de 2012, Bell fue sometido a un proceso judicial por la extracción de piedra en un terreno en Río Blanco de Limón. Su esposa, Andria Araya, y el alcalde de Limón, Néstor Mattis Williams, también estuvieron involucrados en el caso, pero en el 2018 fueron absueltos de todos los cargos.
En agosto del 2015, las autoridades demolieron un enclave portuario que Bell construyó ilegalmente en terrenos estatales en Portete, Limón, como parte de un esfuerzo para combatir las construcciones irregulares.
Menos de dos semanas después de una comparecencia, Bell fue detenido en Limón por presuntamente sobornar a oficiales de tránsito para permitir el transporte de drogas entre Limón y San José, a través de la ruta 32. La Fiscalía implicó a tres inspectores por supuestamente aceptar los sobornos, pero más tarde fueron liberados y desvinculados del caso.
Entre el 2015 y el 2016, La Nación reportó que las embarcaciones de Bell recibían exoneraciones de combustible desde el 2008 para sus actividades pesqueras. Durante ese tiempo, Bell trabajaba como asesor en el Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca), cargo que perdió tras su arresto en 2015. Su designación fue promovida por Anita Mc Donald, miembro de la Junta Directiva del Incopesca y familiar de Bell, quien fue destituida por violaciones a la probidad.
En el 2017, Bell fue llevado nuevamente a juicio por narcotráfico y legitimación de capitales, pero en el 2018, la Fiscalía solicitó el sobreseimiento en el Tribunal Penal de Goicoechea.
En junio del 2018, fue detenido junto a una organización involucrada en el robo de combustible del poliducto de Recope. A pesar de que los robos fueron valorados en más de ¢2.092 millones, Bell y otros 14 sospechosos fueron liberados en julio de ese año.
En julio del 2019, la causa penal contra Bell por la usurpación del muelle en Portete prescribió, exonerándolo de los cargos.
Macho Coca volvió a ser noticia en noviembre del 2023, cuando la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos lo señaló como uno de los principales narcotraficantes de Costa Rica, conocido por la violencia con la que opera.
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