San José (Redacción). La exdiputada liberacionista Maureen Ballestero Vargas fue condenada hoy a tres años de prisión al aceptar en un proceso abreviado que utilizó, para asuntos personales, en dos ocasiones avionetas del Ministerio de Seguridad Pública.
La pena la dictó el Tribunal Unipersonal de Hacienda, a cargo del juez Hugo Porter, mediante un proceso abreviado.
Ballestero fue condenada por dos delitos de peculado. Según un convenio al que llegó con el Ministerio Público y la Procuraduría General de la República, la exlegisladora no irá a prisión, pero durante el lapso de tres años no podrá cometer ningún otro delito doloso.
Además, quedó inhabilitada para el ejercicio de cargos públicos durante un período de tres años.
Asimismo, se comprometió a pagar Estado $1.190 más ¢1 millón como acción civil resarcitoria.
En este mismo proceso, Natalia Chaves Ballestero, hija de la exlegisladora, a quien la Fiscalía atribuyó un delito de peculado por viajar en uno vuelos, se acogió a un proceso a prueba. Natalia Chaves deberá cumplir con 120 horas de trabajo comunitario en un proyecto de la Escuela Nacional de Policía.
El juez Porter advirtió a Chaves que esa labor la deberá realizar en las instalaciones de la Escuela de Policía y no por medios electrónicos.
Los hechos que se juzgaron ocurrieron en los meses de setiembre y octubre del 2011.
En primera instancia ase verificó que el 5 de setiembre Maureen Ballestero que en ese momento era diputada solicitó al Ministerio de Seguridad le facilitaron una avioneta para viajara a Liberia, Guanacaste, para reunirse con personeros del Museo de Guanacaste. No obstante, en esa oportunidad la exdiputada asistió a una reunión de la asamblea cantonal del Partido Liberación Nacional (PLN), donde era delegada.
El segundo hecho sucedió el 11 de octubre cuando de nuevo la legisladora solicita la aeronave a Seguridad y fue para asistir a otra reunión de carácter político.