Una mujer de 23 años llamó a sus familiares y les hizo creer que ella y sus dos hijos estaban secuestrados. A cambio de que no les hicieran daño, dijo que los captores reclamaban ¢10 millones que debían ser depositados en una cuenta bancaria.
Los asustados allegados habrían recibido mensajes por medio de telefonía celular y videos donde supuestamente tenían a los menores privados de libertad, bajo amenazas con arma de fuego, agrega un reporte de prensa del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) divulgado este jueves.
Los hechos se remontan al 2 de agosto de este año, en Paquera de Puntarenas. Los familiares alertaron a las autoridades judiciales y, con orientación policial, hicieron un depósito bancario. Acto seguido, tanto la mujer, de apellido Ruiz, como los niños, fueron liberados.
Sin embargo, el plan no concluyó como la joven esperaba, pues por medio de varias diligencias policiales, las autoridades obtuvieron “información que ratificaba que no existió tal secuestro y que en apariencia fue esta femenina quien lo simuló, quien retiró el dinero y se lo habría dejado”.
Por eso este miércoles, a la 1:30 p. m. agentes del OIJ de Cóbano, bajo la dirección funcional del Ministerio Público, detuvieron a la sospechosa en barrio La Tranquilidad, en ese mismo distrito porteño, al momento en que salía de su casa de habitación.
Ella quedó a las órdenes del Ministerio Público, como sospechosa de simulación de delito, que se castiga con prisión de un mes a dos años, según lo establece el artículo 327 del Código Penal.
Por último, los agentes del OIJ de Cóbano informaron al Patronato Nacional de la Infancia (PANI) sobre lo sucedido, para que dicha institución realice los procesos correspondientes en relación a los dos menores afectados en este caso.
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