Los primeros resultados de la autopsia realizada al cuerpo de Paula Verónica Salas Mora, de 24 años, descartan una muerte accidental y confirman que fue víctima de homicidio, a raíz de los golpes recibidos en una casa en Pavas.
En principio, la Policía Judicial tenía dudas sobre la forma de muerte de la mujer, pero este jueves se confirmó que fue asesinada.
El caso fue descubierto al mediodía del martes, en una vivienda de la urbanización Bribrí, en Lomas del Río.
El OIJ confirmó que los traumas que la mujer recibió en la cabeza y el cuello fueron letales.
La joven también presentaba golpes en sus rodillas y yacía tendida en un sillón cuando los socorristas del Comité Metropolitano la declararon fallecida.
Según datos del Registro Civil, su último lugar de residencia lo tuvo en Patalillo de San Antonio, Coronado; aunque también vivió en Guadalupe, donde afrontaba problemas de adicción.
En los últimos años, ella no tenía un domicilio fijo y deambulaba, por lo que el último día de su vida lo pasó en una propiedad de la madre del hombre que se sospecha la asesinó.
Se trata de un sujeto de apellidos Martínez Díaz, de 27 años, quien fue detenido la tarde del miércoles por parte de las Sección de Homicidios del Organismo de Investigación Judicial (OIJ, como sospechoso.
Martínez tenía una relación sentimental con la víctima y se le detuvo en una chatarrera en finca San Juan de Pavas.
Feminicidio
La Fiscalía tramita el caso como un feminicidio, pues las primeras investigaciones le estarían atribuyendo la muerte al compañero sentimental.
La tarde de este jueves esa entidad informó de que la Plataforma Integral de Servicios de Atención a Víctimas (PISAV), gestionó ante el Juzgado Penal de Pavas la medida de seis meses de prisión preventiva contra Martínez Díaz, la cual fue acogida.
Añaden que el sujeto es investigado por un delito de feminicidio, en perjuicio de Salas Mora.
Según las primeras pesquisas, cuando se descubrió el homicidio, la mujer tenía algunas horas de fallecida, pues todo parece indicar que los hechos ocurrieron en la madrugada de este 26 de enero.
“Por razones que todavía están bajo investigación, se sospecha que el imputado habría golpeado a la mujer hasta acabar con su vida”, dice el comunicado de la Fiscalía.
El caso continúa en investigación, bajo el expediente 21-000087-0053-PE.
Denuncias a tiempo
La joven fallecida era madre de dos hijas de ocho y de cuatro años de edad, las cuales están con sus abuelas desde hace varios años.
El Patronato Nacional de la Infancia (PANI), informó de que lo anterior se sustenta en depósitos judiciales gestionados por la oficina local de esa institución en Guadalupe, Goicoechea.
Cuando el PANI recibe alguna denuncia por niños, niñas o adolescentes en riesgo, interviene en las familias y eso fue lo que aconteció en este caso.
En el 2014 se tuvo la primer denuncia y la niña mayor, que en ese momento tenía dos años, pasó a manos de la abuela materna.
Posteriormente, hubo otra intervención, en el 2018, para que la segunda menor, que ahora tiene cuatro años y diez meses, pasara a manos de la abuela paterna.
Ambas niñas se encuentran bien de salud, gracias a oportunas denuncias que permitieron al PANI sacarlas del riesgoso entorno en que vivían.
La atención psicosocial y legal en cada caso determinó la vulnerabilidad y se generó un proceso llamado de abrigo temporal, es decir, su traslado a ambientes más seguros con la venia de un juez.