Dinier Estrada Jiménez, conocido como Ojos Bellos, a quien las autoridades le atribuyen actividades de sicariato y narcotráfico, fue absuelto en un tercer juicio por el asesinato de una niña de 12 años.
El Tribunal Penal de Limón otorgó la absolutoria este miércoles, porque no aparecieron dos testigos del crimen, ocurrido el 17 de diciembre del 2010 en barrio Limoncito, en Limón.
La Fiscalía solicitó la exoneración de cargos, “pese a que en la acusación se contó con el grado de probabilidad suficiente para acreditar que (Estrada Jiménez) habría participado en los hechos que concluyeron con el homicidio de la niña”, informó el Ministerio Público.
La menor, que al momento de los hechos salía de su fiesta de la alegría, estaba a 25 metros de su casa, cuando fue impactada por una bala.
Según la acusación de la Fiscalía, el día en que la niña murió, un sujeto llamado Roberto Maxwell viajaba junto a otro de apellido Alfaro en un pick-up Toyota Hilux, cuando se toparon con Estrada y Jeremy Rivas, quienes iban en un Ford F150. Estos últimos empezaron una persecución, hubo un intercambio de disparos y la niña recibió uno de los disparos.
Lo resuelto en dos debates anteriores, en los que se juzgó a Estrada y Rivas por este mismo homicidio, fue anulado por tribunales de apelación, luego de que los jueces encontraran vicios de procedimiento.
Pena al otro imputado
El otro imputado en este caso, Jeremy Rivas Picado, de 30 años, se sometió a un procedimiento abreviado para evitar la etapa de juicio, tras aceptar ser responsable de una tentativa de homicidio y homicidio calificado.
Rivas fue condenado este lunes a 13 años y cuatro meses de prisión. Esta sentencia se suma a los 46 años que ya cumplía por el homicidio, en el 2013, de Carlos Blackwood Cerdas.
El sentenciado admitió que el día de la muerte de la niña estaba en un vehículo en el que perseguía a su víctima. Rivas le disparó a su objetivo, pero impactó a la menor de edad.
Este caso se tramitó bajo el expediente 10-002631-063-PE.
Tercera resolución
En primer debate por esta causa, los jueces condenaron a Rivas y a Estrada a 33 años de prisión.
Sin embargo, el Tribunal de Apelación de Cartago anuló el fallo el 11 de marzo del 2016, aduciendo “ineficiencia de la sentencia”.
En su argumentación, los jueces consideraron que la sentencia condenatoria se basó “en graves vulneraciones del debido proceso, en particular de los principios de inmediación y del contradictorio (aseguramiento de interrogatorio cruzado) y con ello del derecho de defensa”, según consta en la resolución 00141-2016.
En el segundo juicio, concluido el 8 de diciembre de ese año, el Tribunal Penal de Limón los absolvió a ambos por dudas sobre su participación en el asesinato de la joven.
La Fiscalía apeló el fallo ante el Tribunal de Apelación de Goicoechea, el cual aceptó el reclamo, y en agosto del 2017 anuló la sentencia y ordenó un nuevo debate.
En aquella ocasión, los jueces consideraron que hubo una “incorrecta aplicación del principio in dubio pro reo”.
“No era posible descartar que ambos acusados sí estuvieron en el lugar del suceso y dispararon con armas de fuego hacia donde estaban los agraviados. Circunstancia que, incluso, (...) admitió expresamente el coimputado Jeremy Rivas Picado”, indicó la resolución 2017-0666 del Tribunal de Apelación.
Estrada ya se libró de otra condena
El 30 de abril del 2018, Estrada evitó otra condena por cinco homicidios, asociación ilícita, tenencia de arma prohibida, dos tentativas de homicidios y almacenamiento de drogas.
Así lo acordó el Tribunal de Juicio de Cartago, debido a que la Fiscalía lo acusó “sin haberse concluido la investigación policial”, expresó en aquel momento la jueza Magaly Orube Rivera.
A él le achacaban el crimen del abogado Roy Ching Leitón, de 65 años, asesinado el 1.° de octubre del 2015, luego de ser baleado dentro de un taxi en la rotonda de las Garantías Sociales en Zapote.
También los asesinatos de Oldemar Segura Brenes, Sady Díaz Geuman, Miguel Ángel Narváez y Allan Castillo Espinoza, quienes aparentemente formaban parte de la banda del Luis Ángel Martínez Fajardo, alias Pollo, y presuntamente, se dieron en la pelea por el territorio de La Unión, para la venta de drogas.
Desde el 2017, Ojos Bellos cumple una pena de 25 años en prisión por intentar matar a dos hombres en un ataque con arma de fuego a una casa, en Pueblo Nuevo de Limón en el 2014.
Tras este suceso, los policías recogieron 121 casquillos y una granada de fragmentación que no explotó.
Los dos ofendidos habían resultado ilesos, pues escaparon por una ventana trasera de la propiedad.
Asimismo, en el 2016 fue condenado a ocho años de cárcel por asaltar a compañeros de colegio, hechos que se remontan a setiembre y octubre del 2009.