El Juzgado Penal de Limón impuso seis meses de prisión preventiva a un operario de APM Terminals en Moín, de apellido Cerdas, investigado por el presunto delito de transporte internacional de drogas. A Cerdas se le relaciona con una red que, en el último cuatrimestre del 2022, habría exportado 700 kilos de cocaína ocultos en un contenedor de banano enviado desde esa terminal hacia Róterdam, Países Bajos.
Según la oficina de prensa del Poder Judicial, a los otros cuatro sospechosos, apellidados Piña, Vega, Valladares y Delgado, se les impusieron medidas cautelares alternativas a la prisión. Estas incluyen la obligación de presentarse a firmar una vez al mes en la Fiscalía, mantener domicilio y empleo fijo, y la prohibición de salir del país.
Los cinco operarios fueron detenidos el 31 de octubre, tras seis allanamientos realizados por la Fiscalía y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en distintas localidades de Limón y en las instalaciones portuarias de la región.
De acuerdo con Manuel Jiménez Steller, viceministro de Seguridad, Piña era empleado de seguridad privada, Vega trabajaba como chofer en la terminal, Valladares y Cerdas eran operarios de grúa, y Delgado también laboraba en el puerto, aunque su cargo no fue especificado. Durante los operativos, se buscaba capturar a un sexto sujeto de apellidos Villachica González, conductor de cabezal, pero no fue posible su detención, ya que se tiene conocimiento de que salió del país.
Investigación inicial empezó en 2022
La investigación por este caso se inició poco después de que agentes de la Policía de Países Bajos detectaran el cargamento en un contenedor legítimo de fruta que había salido de Costa Rica y llegó a ese país a finales de setiembre del 2022. Posteriormente, las autoridades costarricenses identificaron que el contenedor fue contaminado en Moín, el 5 de setiembre de ese año, a las 3:46 a. m.
Ese día, un conductor ingresó a la terminal con un cabezal donde transportaba 25 bultos con los 700 paquetes de clorhidrato de cocaína, cada uno con un peso aproximado de un kilogramo.
El cabezal fue revisado superficialmente por el agente privado de seguridad, mientras que otros operarios movieron un contenedor hasta un punto específico del puerto donde lo contaminaron con la droga. En las acciones, participaron otros cinco sujetos, que se encargaron de pasar los bultos, pero estos no han sido identificados.
Periodista de la sección de política. Graduada como bachiller en Derecho de la Universidad de Costa Rica. Estudiante activa de bachillerato y licenciatura en Comunicación Colectiva en la misma institución. Trabajó para Doble Check.
En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.