Los padres del menor de 13 días, quien al parecer falleció por el síndrome del niño agredido, descontarán tres meses de prisión preventiva, luego de que la Fiscalía de Hatillo apelara las primeras medidas cautelares impuestas a la pareja.
De acuerdo con el Ministerio Público, la audiencia de apelación se realizó este martes y en esta se consiguió que el padre del bebé, de apellidos Madrigal Pérez, y su madre, apellidada Montero Rojas, vayan a la cárcel mientras avanza la investigación en su contra.
Originalmente se les había dejado en libertad, pero con monitoreo electrónico con una tobillera.
Los hechos que están bajo análisis ocurrieron el pasado 7 de mayo, cuando el menor falleció en la clínica de Alajuelita, San José, poco después de su ingreso.
Según las pesquisas iniciales realizadas por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), una patóloga juducial revisó las lesiones que presentaba el niño y se determinó que tenía moretes en la parte baja de la espalda y las ingles.
Asimismo, se determinó que eventualmente había un problema respiratorio que podría estar vinculado con la muerte.
La pareja habitaba una vivienda de la urbanización San Felipe, en San Felipe de Alajuelita, la cual fue allanada como parte de la investigación.
La mujer trabaja como empleada de un restaurante y el hombre se desempeña como peón de construcción. En el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) aparece que contrajeron matrimonio hace siete meses y tienen otros dos hijos de 5 y 3 años.
El bebé fallecido aparece con los apellidos solo de la madre, confirmó la Policía Judicial.
La Fiscalía mantiene en investigación el caso bajo el expediente 19-013165-042-PE, por el presunto delito de homicidio calificado.
De acuerdo con el artículo 112 del Código Penal, será sancionado con penas de 20 a 35 años de prisión “a quien mate a su ascendiente, descendiente o cónyuge”.