Luego de que el 20 de junio el Tribunal Colegiado Civil de Heredia ordenó que se inscribiera una nueva junta directiva de la Sociedad Anónima Busetas Heredianas, este martes las autoridades allanaron el plantel, que está en las inmediaciones del mall Paseo de las Flores, con el fin de que la nueva junta pudiera tomar posesión.
La Fiscalía Adjunta de Heredia confirmó que el allanamiento surgió como parte de una denuncia interpuesta por parte de uno de los socios de la compañía, de apellido Víquez, por el presunto delito de usurpación.
Ello debido a que la anterior junta directiva no ha permitido a la nueva conformación de socios ingresar a las instalaciones, informó la oficina de prensa del Ministerio Público.
La semana pasada se realizó una diligencia pacífica donde la Fiscalía, la Fuerza Pública y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) llegaron al sitio con el objetivo de lograr la toma de posesión de la nueva junta, a partir de lo ordenado por el Tribunal; sin embargo, el ingreso fue impedido por la seguridad privada.
En virtud de lo anterior, se gestionó ante el Juzgado la acción operativa de esta mañana, en la que, además de buscar la toma de posesión, se recolectaron posibles pruebas para incorporar al legajo judicial.
El caso se tramita bajo el expediente N.° 22-1523-369-PE y de momento figura como imputada una persona de apellidos Araya Osegueda. Según la Fiscalía, por encontrarse en una fase que es privada, de momento solo esa información pueden suministrar.
Fuertes rencillas
Juan Diego Víquez, socio que interpuso la denuncia por usurpación, reclamó en setiembre del 2021 una supuesta inacción por parte del Poder Judicial en el pleito que existe desde hace 25 años por el control de la empresa.
La discusión tiene en un bando a Óscar Ramírez Jiménez, quien es el presidente y administrador de la compañía desde hace mucho tiempo, mientras que en el otro bando están Juan Diego Víquez, Minor Garita Soto y otro individuo, de apellido Lara.
Según dijo Víquez esa vez, Ramírez es un socio minoritario, pero se aprovecha de su posición para prohibirles ser parte de su propia empresa.
Por esos mismos líos, un grupo de 10 personas armadas, del grupo de Víquez, entró a la fuerza al plantel en agosto del año pasado, como parte de las rencillas entre quienes se enfrentan por la forma en que se maneja la empresa.
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Víquez indicó entonces que Ramírez se hace valer de amenazas para amedrentarlos; incluso atentó contra la vida de uno de sus socios, por lo cual fue condenado en setiembre del 2021 a 18 años de cárcel.
Como parte de las diligencias de este martes, las autoridades cerraron el perímetro aledaño a la empresa, por lo que conductores que entran y salen de Heredia reportaron presas. Los peatones tampoco podían transitar por esa zona.