Apenas cinco miembros de los once integrantes de una peligrosa organización ligada al tráfico de drogas y homicidios, conocida como Los Gery, cumplirán penas que van desde los ocho años hasta los 28 años de cárcel, determinó este lunes el Tribunal Penal de Cartago.
Contra los otros seis, los jueces dictaron absolutoria por duda, pues no tuvieron suficientes elementos para acreditar los delitos que le atribuía la Fiscalía, entre ellos: asociación ilícita, legitimación de capitales, otros delitos de tentativas de homicidio calificado, robo agravado, daños agravados, agresión calificada, privación de libertad agravada y portación ilegal de arma permitida. Debido a esta larga lista de hechos imputados, la Fiscalía había solicitado un total de 524 años de cárcel contra las 11 personas sospechosas.
Las sanciones más altas fueron para Gery Alexander Campos Barrantes y Hernán Andrés Alvarado Vega. Estos imputados, de 27 y 33 años respectivamente, fueron condenados a ocho años de cárcel por la infracción a la Ley de Psicotrópicos en modalidad agravada, más 20 años por el homicidio calificado de un menor de edad.
También fueron condenados Dylan Josué Soto Peraza, Jeison Soto Peraza y Diego José Sandí Romero, quienes recibieron ocho años cada uno por infringir la Ley de Psicotrópicos. Dylan Soto Peraza recibió una pena adicional de 15 años por una tentativa de homicidio calificado.
En tanto, los exonerados responden a los apellidos Campos Barrantes (hermano del sentenciado), Villalobos Zumbado, Salazar Barquero, Paniagua Hernández (quien ya cumplía condena de 30 años por homicidio), Morales Miranda y Zúñiga Ramírez.
Según la acusación de la Fiscalía, la banda había operado del 28 de abril de 2016 al 31 de mayo del 2018, en Tres Ríos de La Unión y Tirrases de Curridabat, y se dedicaba a vender cocaína y marihuana. El grupo cometió crímenes contra miembros de otras organizaciones criminales, como homicidios y tentativas de homicidios, debido a enfrentamientos por territorio de venta de drogas.
Además, la banda se habría dedicado al constante alquiler temporal de propiedades y la compra de bienes inmuebles con el dinero que habrían ganado con la venta de narcóticos. Al parecer, la mayoría de la droga llegaba desde Limón y era almacenada en las propiedades de los miembros, en Tres Ríos de La Unión, Cartago.
La madrugada del 31 de mayo del 2018, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) realizó 11 allanamientos y detuvo a ocho personas.
En los allanamientos, los agentes habían decomisado más de ¢5 millones, varias pistolas de calibre .40 y de calibre 25, así como revólveres calibre 38. Además, fueron hallados un kilo de cocaína, tres libras de marihuana, 500 gramos de cajeta de crack y varios cristales conocidos como ice.
En uno de los allanamientos en La Unión se encontró un equipo de laboratorio hidropónico listo para instalar, incluso con macetas, luces y abono. También había dos cascos de motos que los vincularon con algunos homicidios.
“La acusación señaló que, en apariencia, el desarrollo de la actividad ilícita también comprendió la introducción de sumas de dinero, producto del narcotráfico, dentro del sistema financiero nacional”, indicó el Ministerio Público.