Un individuo de 32 años negoció la compra de un teléfono celular usado y, una vez que lo tuvo en su poder, descubrió que en una de la aplicaciones habían quedado olvidados varios contactos, por lo cual aprovechó para enviarles material que contenía pornografía infantil.
El hecho lo descubrió el antiguo dueño del aparato durante los primeros días de noviembre, cuando personas conocidas lo increparon sobre el contenido sexual de los videos que estaba enviando. De inmediato, esa persona interpuso la denuncia ante el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Puriscal, en San José, donde contó a los agentes que en una fecha reciente había negociado el celular con otro sujeto y que a cambió le habían dado una consola de videojuegos.
El hombre declaró que posiblemente en su antiguo aparato habían quedado sus contactos, quienes fueron los que alertaron del hecho delictivo. Los investigadores judiciales, por medio de varias diligencias policiales, identificaron al sospechoso, un individuo de apellidos Montenegro Aguilar, de 32 años, a quien detuvieron este miércoles a las 10 a. m. cuando le allanaron su vivienda en San Antonio de Puriscal. En dicha casa decomisaron teléfonos celulares y material impreso con imágenes de contenido sexual.
El Código Penal establece que el delito de tenencia de material pornográfico será sancionado con pena de prisión de seis meses a dos años, mientras que la difusión es castigada con entre uno y cuatro años de cárcel. El sospechoso quedó a la orden de la Fiscalía de Puriscal.
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