Un video de seguridad se convirtió en la prueba clave para que el Tribunal Penal de Alajuela sentenciara, recientemente, a ocho años de prisión a un sujeto por los delitos de abuso sexual y robo.
El hecho que se juzgó sucedió el 23 de abril del 2018, en Villa Bonita de Alajuela, cuando el sentenciado de apellidos Araya Ross, junto con un cómplice apellidado Cambronero Herrera, ingresaron como supuestos compradores a una vivienda, propiedad de una pareje, en la cual vendían artefactos electrónicos, informó la oficina de Prensa del Poder Judicial.
De acuerdo con la acusación fiscal, los individuos llamaron días antes a la casa de la víctima para negociar la compra. Los implicados quedaron en llegar el 23 de abril.
El día de los hechos en la casa solamente se encontraba la mujer, pues su esposo estaba fuera del país.
Los sospechosos, una vez que la mujer abrió la puerta, sacaron armas de fuego para amenazar a la ofendida. Luego la amarraron con un cable de televisión y Araya aprovechó la indefensión de la mujer para tocar las partes íntimas.
Antes de huir, los individuos se apoderaron de computadoras, celulares y ¢700.000 en efectivo.
Sin embargo, los asaltantes no se percataron que antes de que ellos ingresaran el esposo de la víctima, quien estaba fuera del país, se encontraba en una video llamada por WhatsApp. Por esa razón el hombre, al escuchar lo que estaba ocurriendo, activó las cámaras de seguridad para que se grabara el hecho.
Con el video de lo sucedido, agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) solicitaron la colaboración de la ciudadanía para identificar primero a los imputados y luego proceder a la captura.
De esa manera, Cambronero se entregó a las autoridades el 25 de abril del 2018, mientras que Araya fue detenido en mayo de ese mismo año
El Tribunal Penal de Alajuela condenó a Cambronero a cinco años por un delito de robo agravado.
La investigación de este caso estuvo a cargo de la Fiscalía Adjunta de Alajuela y se tramitó en la causa 18-2022-057-PE.