El zaguero Óscar Duarte Gaitán, de 25 años, vendría a Costa Rica a responder por una acusación penal, por supuestamente amenazar con una pistola al guarda de seguridad del bar Coco Loco, en Santa Teresa de Cóbano, Puntarenas.
La Fiscalía de Cóbano pedirá el 4 de setiembre, durante una audiencia preliminar en el Juzgado Penal de la zona, que el caso sea elevado a juicio. En esa vista, se podría, incluso, solicitar algún tipo de medida cautelar contra el sospechoso, entre ellas, el impedimento de salida del país.
La Nación conversó vía telefónica con Vanessa Crespi, esposa del seleccionado, quien indicó que desconocían la convocatoria a esa audiencia, incluso, sostuvo que la denuncia los tiene sorprendidos a ambos allá en Bruselas, donde Duarte milita con el Brujas de Bélgica.
La mujer manifestó que el jugador viajó a Suiza, en donde hoy juega contra el Grasshoppers, por lo que no fue posible hablar con él.
“Si él (Duarte) tiene que presentarse, él va a ir, mientras el abogado tenga la disponibilidad y Óscar no tenga torneos. No sabíamos de eso (la audiencia) ni de esa denuncia. Sabíamos el otro caso de la señora, pero eso está cerrado. De todo corazón le digo que esa noticia nos dejó con la boca abierta”, dijo Crespi.
Duarte tuvo una destacada actuación en el Mundial Brasil 2014 con la Selección Nacional. En julio, el jugador visitó al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, quien le brindó un homenaje por ser el primer futbolista nacido en ese país en disputar una Copa del Mundo.
Acusación. La Fiscalía sostiene que los hechos se produjeron el 26 de mayo del 2012, en las cercanías de aquel bar, cuando, por circunstancias desconocidas, Duarte amenazó con un arma de fuego al guarda del establecimiento, de apellido Velásquez. La acusación se presentó el 24 de febrero del 2014, ante el Juzgado Penal de Cóbano.
Leonel Villalobos confirmó ayer a este diario, vía telefónica, que está representando al jugador en ese proceso, pero dijo que no podía conversar porque estaba en un juicio. Al cierre de edición, no contestó más su celular.
Prescrito. La Fiscalía también había acusado a Óscar Duarte por los delitos de agresión calificada y accionamiento de arma de fuego, a raíz de una denuncia que ingresó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
En esa denuncia se señaló que Duarte, presuntamente, llegó a una vivienda el mismo 26 de mayo del 2012, hacia las 5 a. m., donde había una decena de personas. Allí, tuvo un altercado con algunas de ellas y encañonó a una amiga con una pistola de nueve milímetros.
Al parecer, el jugador también amenazó con el arma a otro individuo y luego se retiró a pie, por solicitud de la dueña del inmueble. Según confirmó la Fiscalía, las ofendidas fueron una joven y su madre.
Sin embargo, el caso fue archivado por el Juzgado Penal y se dictó un sobreseimiento, pues ya había prescrito y la Fiscalía no presentó ninguna apelación.
El abogado Erick Ramos indicó a La Nación que él defendió a Duarte en ese último proceso, pero sostuvo que en la otra causa está su colega Leonel Villalobos.