EscucharAunque fue detenido hace un año y ocho meses, Costa Rica no ha podido extraditar a un búlgaro ligado a un gran fraude en su país porque se tienen dudas sobre si él es el prófugo buscado por Interpol .
Las autoridades judiciales tendrán que esperar un nuevo debate antes de saber si el búlgaro Hassell Bosman Petrova es en realidad el prófugo internacional Kitov Ivan Velinov.
La Sala de Casación dejó sin efecto la condena de 4,6 años que le impuso a Bosman el Tribunal de Juicio de Alajuela por uso de documento y falsedad ideológica.
Al búlgaro lo acusó el Ministerio Público por utilizar una identidad falsa para casarse aquí y obtener la ciudadanía costarricense.
El sujeto fue arrestado por agentes de la Dirección de Inteligencia y Seguridad Nacional (DIS) en las afueras de la embajada de los Estados Unidos, en Pavas, San José, el 13 de enero del 2005.
La supuesta identidad quedó al descubierto cuando personeros de esa sede diplomática llevaron a cabo una comparación de huellas –en una solicitud de visa– y coincidieron con las del prófugo.
En la sentencia, dictada el 28 de noviembre del 2005, el tribunal alajuelense alertó al Registro Civil sobre la anomalía para que se procediera a la anulación del matrimonio.
Bosman se casó en 1999 con una rusa nacionalizada costarricense. Eso le permitió obtener la nacionalidad en el 2001.
De anularse esa unión matrimonial, Costa Rica podría ejecutar la solicitud de extradición planteada por Bulgaria.
Desde el 3 de junio de 1998, un tribunal de Sofia –capital de ese país europeo– emitió una orden internacional de captura.
Kitov Iván Velinov, es requerido por un fraude de 9.000.000 de euros cometido entre el 25 de junio de 1993 y el 23 de setiembre de 1996.
Faltó investigación. Pese a su decisión de anular el anterior debate, la Sala de Casación acordó mantener a Bosman en prisión preventiva otros cuadro meses.
La Sala llegó al convencimiento de que las huellas contenidas en el expediente de trámite de residencia se compararon con otras de un documento en poder de la Policía Internacional (Interpol), que no era original y por lo tanto no era fidedigno.
Tampoco dieron crédito a las similitudes entre Bosman y la fotografía en poder de Interpol a nombre de Velinov.
